Infertilidad masculina

A diferencia de la mujer, el hombre puede concebir a lo largo de toda su vida, desde que produce espermatozoides a partir de la pubertad. Por lo tanto, los problemas para concebir del hombre se deben a cuestiones al margen de la edad, como las que veremos en este artículo.

Antes de definirla, es importante distinguir entre la infertilidad y la esterilidad, dos conceptos similares, pero con significados distintos. Mientras la esterilidad se emplea para hacer referencia a las parejas que no consiguen concebir tras intentarlo un año, la infertilidad alude a la imposibilidad de que el embarazo llegue a término.

Qué es la infertilidad masculina, causas y síntomas

La infertilidad masculina, por lo tanto, puede definirse como la incapacidad para provocar en la mujer que esta quede embarazada, si bien tanto ésta como la esterilidad son problemas que se traducen en la dificultad para tener un hijo. Por lo tanto, en la práctica, las parejas que desean tener un hijo necesitan abordar tanto una como otra.

Las causas pueden ser desde problemas de alteraciones testiculares, en el semen o alteraciones en la eyaculación, así como obstrucción de conductos o, por ejemplo, problemas de próstata. A su vez, éstas pueden tener causas subyacentes que deben identificarse, como enfermedades, problemas congénitos, malos hábitos o la misma edad.

Con respecto a los síntomas, éstos dependerán del tipo de problema que se presente, pudiendo estar asociado a la falta de erección, anomalías en la eyaculación o alteraciones testiculares, pongamos por caso. Igualmente, el mero hecho de que pase un cierto tiempo sin lograr la concepción o una adecuada gestación (abortos) también puede ser indicativo tanto de esterilidad como de infertilidad.

Tratamiento para la infertilidad masculina

Cada problema de esterilidad o infertilidad requiere de un tratamiento específico y, salvo excepciones, los tratamientos de reproducción asistida que existen hoy en día permiten abordar la mayoría de casos de forma satisfactoria.

Por lo general, el especialista realizará una evaluación de la salud reproductiva de la pareja mediante el análisis del semen y otras pruebas que estime pertinente, junto a un examen físico y revisión de la historia clínica. Junto a exploraciones, análisis u otras pruebas necesarias, se tratará la infertilidad del hombre con el fin de conseguir llevar a término el embarazo.

En función del resultado de las pruebas, es decir, de las causas que hayan llevado a la infertilidad , se emitirá un diagnóstico a partir del que se aconsejará la realización de un tratamiento adecuado.

Por otro lado, muchos de los problemas de fertilidad se solucionan cambiando el estilo de vida para así mejorar la calidad del semen. Si queremos mejorar la fertilidad del hombre, podemos recurrir a un tratamiento natural que ayude bien de forma preventiva o terapéutica.

Pautas para mejorar la fertilidad masculina

Entre otras pautas que ayudan a mejorar el estilo de vida y la calidad del semen, se aconseja mantener un peso ideal, practicar ejercicio físico moderado, reducir el estrés, evitar el consumo de alcohol y tabaco una alimentación equilibrada, rica en antioxidantes, vitaminas y vegetales, además de posibles complementos alimenticios.

Para poder hablar de esterilidad o infertilidad en el hombre, por otra parte, es necesario realizar un diagnóstico riguroso, pero incluso antes de plantearlo deben tenerse en cuenta una serie de aspectos. Entre otros, es importante tener en cuenta que no conseguir el embarazo puede no deberse a un problema de esterilidad o fertilidad. Antes de atribuirlo a ello, debería intentarse durante un cierto tiempo, teniendo relaciones sexuales regulares, incluso a edades más avanzadas, cuando la fertilidad se reduce.

Estadísticas de fertilidad

Para hacernos una idea, las parejas de hasta 35 años y sin problemas de salud deben acudir al especialista solo cuando la búsqueda se prolongue más allá del año. Por lo tanto, lograr el embarazo no es tan fácil como pudiera parecer, incluso para las parejas sin problemas de fertilidad o esterilidad. .

Conocer las estadísticas puede orientar, puesto que confirman que aumentar el número de coitos aumenta las probabilidades de concebir, al margen de que puedan producirse abortos de repetición. Al respecto, es importante tener en cuenta que por cada ciclo ovulatorio se tiene alrededor de un 30 por ciento de probabilidades de lograr un embarazo en parejas que practican relaciones de forma regular.

Una probabilidad que aumenta conforme va pasando el tiempo, acercándose al 60 por ciento a los tres meses de búsqueda, y llegando al 72 por ciento y al 85 por ciento a los seis meses y el año, respectivamente, según datos de la Sociedad Española de Fertilidad.

Si no se consigue la gestación en el primer año, durante el segundo lo hará el 90 por ciento de las parejas que no tengan problemas de fertilidad. De media, supone mantener unos 108 coitos en mujeres de entre 20 a 29 años y, conforme aumenta la edad, la cantidad de coitos necesarios también lo hace. Por último, la abstinencia puede disminuir la calidad de los espermatozoides.

 

Preguntas y respuestas sobre infertilidad masculina

Noticias sobre Infertilidad masculina

¿Qué produce infertilidad en los hombres?

Infertilidad masculina

Entre las causas de infertilidad de una pareja, el componente masculino podría representar hasta un 45%, por eso los expertos analizan cuáles son las principales causas de esta falta de fertilidad en los hombres. El abuso de sustancias tóxicas, el estrés, el tabaco o la obesidad son algunos de los factores que aumentan el riesgo de infertilidad en los hombres, según los expertos en urología.

El retraso en la edad de gestación es uno de los factores de mayor incidencia en la dificultad de una pareja para concebir. Además, hay otras causas que se relacionan directamente con los hábitos y la calidad de vida de los hombres, como el abuso del alcohol, el tabaco u otras drogas.

Los expertos alertan que los varones que consumen este tipo de sustancias necesitan más tiempo para conseguir descendencia y tienen una tasa de éxito menor en los tratamientos de reproducción. Por eso, recomiendan reducir la ingesta del alcohol, dejar el tabaco y seguir una dieta sana, dejar de lado los alimentos hipercalóricos y hacer ejercicio físico para lograr una vida equilibrada que mejore la salud general y también la fertilidad.

 

Publicidad