Órbita

La órbita es una de las estructuras del ojo, en forma de cavidad ósea, donde se alojan los globos oculares, y que protege al ojo frente a los impactos. Tiene forma de cono y agujeros por donde pasan nervios y vasos sanguíneos, que a su vez nutren las estructuras intraorbitales. El oftalmólogo será el encargado de tratar los problemas de la órbita.

Patologías de la órbita

Las enfermedades o patologías de la órbita pueden tener su origen en procesos vasculares, congénitos, tumorales o traumáticos. Pueden estar relacionadas con otras enfermedades de tipo neurológico, enfermedad del tiroides, cáncer, entre otras. 

El traumatismo orbitario es una de las patologías más frecuentes de la órbita que ocurren durante accidentes de tráfico, práctica de deportes o actividades físicas, etc. En su mayor parte la vista no se ve dañada, pero puede ocurrir que el impacto sea grande y que se fracturen las láminas de hueso que conforman las paredes de la órbita. En este caso será preciso realizar un TAC, para un correcto diagnóstico, ya que hay dos situaciones que requerirán de intervención quirúrgica:

  • Si la fractura afecta a los músculos de la órbita, se puede producir diplopia o visión doble, con lo que hay que liberar el músculo atrapado y también reparar la pared de la órbita dañada.
  • En caso de enoftalmos, también conocido como ojo hundido, también es necesaria la reconstrucción de la pared de la órbita dañada. 

La orbitopatía tiroidea es la principal causa de proptosis, o desplazamiento hacia adelante del globo ocular. Está asociada con hipertiroidismo, o niveles de hormona tiroidea por encima de lo normal en sangre. La forma de manifestarse es con visión doble o diplopia, miopatía restrictiva, retracción de los párpados o neuropatía óptica. El tratamiento se realiza a través de radioterapia para tratar la inflamación y a través de intervención para la corrección de las secuelas estéticas y funcionales. 

Tumores en la órbita

Los tumores orbitales pueden ser malignos o benignos, siendo poco frecuentes. 

Los angiomas cavernosos son tumores benignos de la órbita que pueden estar presentes desde que se nace. Se tratan mediante intervención quirúrgica.

Los quistes dermoides, los meningiomas, los schwanomas, son otros tumores benignos.

Los linfomas son tumores malignos que se tratarán con quimioterapia o con radioterapia

El cáncer de mama es el tipo de cáncer que a su vez puede tener repercusiones en la órbita.

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Preguntas y respuestas sobre Órbita

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