Opiniones sobre Ignacio Martinez Nuñez - Dentista

Juventud, experiencia un trato extraordinario y el gran equipo que
Ha logrado formar, hace que sea un dentista totalmente recomendable

Es serio, profesional y joven. Ha logrado formar un equipo extraordinario de profesionales, que tiene como fin, no sólo trabajar bien, sino hacer que el paciente se sienta seguro, tranquilo y relajado parra hacer frente a la consulta. extraordinario el doctor Ignacio Martínez y todo el equipo humano que el dirige.

Por poner algo, tienen mucho trabajo y las listas de espera largas. Eso indica lo bien que funcionan. son una referencia en Valle cas.

Es un auténtico profesional y se ve que tiene experiencia.Me da mucha tranquilidad cada vez que voy puesto que tengo mucho miedo al dentista .Siempre muestra un trato cercano y te recibe con una sonrisa.El resto del personal es muy amable y simpático.Antes había una chica de comercial que era muy altiva ,desagradable y prepotente que no pegaba nada con el resto del personal,pero ahora hay otra que completa el equipo para ser una clinica realmente genial.Lo recomiendo 100x100.Orgullo de barri

Nada

Es un dentista muy inesperto, al principio te transmite mucha seguridad y simpatía pero encuanto pagas el servicio la cosa cambia y ya no tiene el tiempo suficiente para atenerte.somos ya unos cuantos pacientes descontentos del barrio que nos estamos iendo a otras clínicas a que nos solucionen los tratamientos realizados por este chico.Tengo el convencimiemto que la clínica no durara mucho.Por mi parte no hablo a nadie bien de allí.yo no quiero quedar mas mal con los vecinos.No da confianza

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muy buen profesional y muy buen consejero y sobre todo su trato humano , te sientes como si estuvieras con un amigo de siempre, actualmente me esta tratando y puedo decir que me da mucha seguridad
muchas gracias Nacho y un saludo..... DOLORES de Vallecas

Mucha seguridad en la ejecución de su trabajo, a pesar de su juventud.

Un trato exquisito que unido a su profesionalidad hacen que te de tranquilidad el ponerse en sus manos