"El drenaje linfático manual no es solamente una terapia curativa, es también una técnica preventiva, ya que ayuda a formar nuevas vías de drenaje estimulando así el sistema linfático, con el fin de evitar que la linfa se acumule y favorecer su transporte y eliminación"
Belén Fernández es fisioterapeuta, Graduada por la Universidad Pontificia de Comillas. Cuenta además con formación en fisioterapia osteoarticular, inducción miofascial, fisioterapia en uro-ginecología y obstetricia, fisioterapia en pelviperineología y drenaje linfático manual. Actualmente ejerce como Directora del área de fisioterapia y responsable de la unidad de mujer y pediatría en Premium Madrid
Premium Madrid es un centro que ofrece a sus pacientes las más avanzadas técnicas de diagnóstico, prevención y tratamiento de las diversas lesiones músculo-esqueléticas. Brindando un trato personalizado e individualizado, con el fin de atender las necesidades particulares que presenta cada caso, determinando las técnicas más idóneas para lograr la rehabilitación del paciente.
¿Por qué decidiste dedicarte a la Fisioterapia, y especializarte en los tratamientos aplicados después de la intervención de mastectomía?
La fisioterapia es una carrera muy vocacional, al igual que todas las carreras del ámbito sanitario. En mi caso decidí dedicarme a la fisioterapia porque me gusta ayudar a las personas a recuperarse y desde esta profesión se hace de una forma muy cercana, con tus propias manos, lo cual me parece fascinante.
Dentro de la fisioterapia tengo especial vocación por el tratamiento de la mujer, dedicándome especialmente a tratar mujeres durante el embarazo y el posparto; a realizar tratamientos de suelo pélvico y a ayudarlas frente a otras adversidades que pueden sufrir a lo largo de la vida, como es el cáncer de mama.
¿Qué molestias post-operatorias aparecen después de someterse a una mastectomía?
La paciente intervenida de una mastectomía puede sentir molestias o rigidez en la zona de la mama y zona axilar, por las cicatrices ocasionadas en la cirugía.
Otros síntomas frecuentes son: dolor en el hombro homolateral a la cirugía (que en algunos casos puede desencadenar en una tendinitis o capsulitis), molestias o dolores de cuello, pesadez en el brazo y, en algunas ocasiones, se observa un edema en el brazo, antebrazo o mano de forma precoz.
¿Cuál es la técnica principal de recuperación utilizada?
Dependiendo de cuál sea el síntoma que más limite a la paciente, la principal técnica de tratamiento varía, pudiéndose aplicar desde drenaje linfático manual (DLM) y vendaje multicapa en aquellos casos donde predomine el edema, hasta otras técnicas de tratamiento más enfocadas a tratar el hombro, las cervicales o las cicatrices.
Además del DLM ¿Qué más se puede hacer para lograr la completa recuperación tras una mastectomía?
En primer lugar, tras la intervención, lo más importante es tratar las cicatrices ocasionadas por la cirugía para darle elasticidad al tejido y evitar así problemas en el futuro. También se realizan movilizaciones articulares para relajar y devolver la movilidad a las cervicales, el hombro y, en cuanto el oncólogo de su autorización, se empezaría a realizar drenaje linfático manual para estimular el sistema linfático.
Destacar aquí que el drenaje linfático manual no es solamente una terapia curativa, es también una técnica preventiva, ya que ayuda a formar nuevas vías de drenaje estimulando así el sistema linfático, con el fin de evitar que la linfa se acumule y favorecer su transporte y eliminación. Sólo en el caso de aparición de linfedema, tras el drenaje linfático manual se aplicaría un vendaje multicapa, para mantener los efectos obtenidos en el miembro superior, con el drenaje linfático.
Se ha demostrado por tanto, que realizar drenaje linfático manual de forma precoz, disminuye el riesgo de aparición del linfedema.
Además de todas estas técnicas que el fisioterapeuta puede aplicar sobre el paciente, hay una serie de ejercicios que el paciente deberá realizar en su domicilio con 2 objetivos fundamentales: por una parte trabajar la movilidad y estabilidad del hombro/brazo y por otra estimular el sistema linfático para favorecer la eliminación de la linfa. Estos ejercicios se pueden realizar en seco o en el agua. Al realizarlos en el agua, la paciente se beneficia del papel que ejercen sus propiedades (presión hidrostática, fuerza de flotación, temperatura y tensión superficial) sobre el edema.
Se considera una recuperación completa cuando la paciente deja de sentir molestias en el brazo, su movilidad y estabilidad es buena y las cicatrices estén libres de adherencias.
Ante la intervención de reconstrucción de mama ¿Cómo puede ayudar la fisioterapia?
Trabajamos de forma parecida con reconstrucción de mama que sin reconstrucción. En caso de reconstrucción un punto más clave todavía es el tratamiento cicatricial para elastificar la piel donde luego va a colocarse la prótesis y evitar que se creen adherencias (normalmente cuando la paciente quiere hacerse una reconstrucción, ponen un expansor para dilatar la zona).
Una vez colocada la prótesis se trabaja el musculo pectoral, se hacen técnicas de reeducación postural global para evitar el enrollamiento de hombros, sobre todo el del lado operado, y también se realizan movilizaciones de la prótesis para evitar que se formen adherencias o un encapsulamiento de la misma.
El resto del tratamiento que afecta a las cervicales y al hombro, es el mismo que en el caso de una mastectomía sin reconstrucción de mama.