Entrevista a Charo Díaz, fisioterapeuta

 "Durante la entrevista de la historia clínica siempre salen cosas que el paciente ha aceptado como normales en su vida, como dolores de cabeza, problemas digestivos etc. que también se pueden trabajar desde la fisioterapia."

Charo Díaz es fisioterapeuta, titulada por la Universidad de Salamanca. Cuanta con más de 20 años de experiencia en el tratamiento de diferentes lesiones y enfermedades musculoesqueléticas, ayudando a sus pacientes a mejorar su calidad de vida. Forma parte del Colegio de Fisioterapeutas de Madrid.

¿Cómo decidiste dedicarte a esta profesión?

Desde mi niñez tuve claro que de mayor quería trabajar en un hospital. El mundo sanitario me atraía enormemente, aunque la figura más llamativa para mí era la enfermera. Quizá por esa relación que tenía con el paciente, así que poco a poco fui dando pasitos estudiando primero Auxiliar de clínica después Técnico de radiodiagnóstico y por fin llegó la universidad. Y allí decidí que quería ser fisio. Sentía que su trabajo era aún más parecido a aquello que yo quería de niña, acompañar al paciente en su proceso.

La realidad me ha dado la oportunidad de trabajar en lo público y en lo privado. Trabajos totalmente diferentes por el tipo de pacientes, pero igual de bonitos.

¿Cuál es la mayor satisfacción que te aporta tu trabajo?

Una de las mayores satisfacciones de mi trabajo es cuando al terminar una sesión el paciente me dice que se encuentra mucho mejor, o cuando a la sesión siguiente al preguntarle por algún síntoma que me contaba la primera vez, ya ni se acordaba de su existencia.

¿Cuáles son los tratamientos o terapias más demandados por tus pacientes?

Si te refieres a que tipo de patología presentan mis pacientes, estos son en su mayoría agudos por alguna contractura de tipo posicional o traumática, por tanto el tratamiento es a nivel osteoarticular. Aunque durante la entrevista de la historia clínica siempre salen cosas que el paciente ha aceptado como normales en su vida, como dolores de cabeza, problemas digestivos etc. y que también se pueden trabajar.

Si te refieres a que haya pacientes que vengan con una “idea de tratamiento concreta” no es lo habitual en mi caso, lo cual creo que agradecemos todos (los profesionales).

Entre los tratamientos que ofreces en tu consulta ¿Cuál de ellos es el más complicado de realizar?

Todos tenemos una manera en la que trabajamos mejor que en otra. Pero aparte de esto, que el tratamiento sea o no complicado también depende del tipo de paciente. Por ejemplo hay pacientes que no se sienten cómodos con una técnica profunda miofascial, o que no saben relajarse. Esto siempre dificulta un poco el tratamiento.

¿Cuál es el avance tecnológico que más ha favorecido a tu especialidad en los últimos años?

Avance tecnológicos hay muchos, pero mi trabajo es esencialmente manual y me abastezco de la experiencia de fisios anteriores que han tenido la voluntad de investigar y de crear técnicas de las que ahora nosotros sacamos provecho. Por eso a ellos: muchas gracias.

¿Qué recomendación le darías a los pacientes que sufren de algún problema o dolencia y aun así no acuden a la consulta de un especialista?

Siempre les digo lo mismo: el síntoma puede desaparecer por un tiempo pero el problema que lo causa sigue ahí ya sea algo traumático o no, con lo cual puede acabar apareciendo en otro momento.

Vale más una o dos sesiones que estar sufriendo cada dos por tres un dolor o una molestia y tener además que tomar medicamentos (que nos podríamos ahorrar) para combatirlo.