Después de diplomarse en Fisioterapia, Marta Alegre dio inicio a su carrera trabajando en clínicas privadas y asumiendo suplencias en la Seguridad Social. A lo largo de este período, acumuló una valiosa experiencia que influyó significativamente tanto en su desarrollo profesional como en el plano personal. Continuó su formación en campos como biomecánica y tratamiento de lesiones deportivas. Al cabo de un año, materializó la creación de su propio centro, en el que aplicó su perspectiva única en torno a la fisioterapia, caracterizada por un enfoque íntimo y personal, centrándose en la individualidad de cada paciente para brindar tratamientos personalizados. Después de trabajar de manera independiente durante nueve años, Marta no dejó de ampliar su formación en diversas disciplinas. Sin embargo, su formación más enriquecedora emergió de la interacción constante con sus pacientes, que con el paso del tiempo se transformaron en amistades cercanas.
En Sportsalud escuchamos atentamente a nuestros pacientes. En muchas ocasiones el paciente llega con varias pruebas o informes y al sentarse nos deja esos documentos en la mesa y nos dice el diagnóstico que tiene o que le han dicho. Entonces nosotros, bien el médico o alguna de las fisioterapeutas, miramos al paciente y le preguntamos antes de ver ningún informe. Le preguntamos, porque nos interesa que nos cuente cómo se siente, cómo le afecta en su día a día el problema de salud por el que viene, cómo, cuándo comenzó. Todo lo que nos cuenta el paciente nos orienta para determinar cuál puede ser la causa y así encontrar el tratamiento adecuado. Lo último que valoramos son las pruebas o los informes. Después realizamos una exploración y proponemos el tratamiento que pensamos más adecuado para el paciente. valorando que necesidades, no solo tratando la lesión sino viendo la causa lesional para poder poner el tratamiento más adecuado para evitar recaídas*
Lo primero es pq lo que más nos importa es lo que nos cuenta el paciente y la exploración que realizamos. Con esto solemos tener el diagnóstico. Las pruebas que solicitamos sirven para confirmar la sospecha diagnóstica o descartar otras enfermedades.
Hay que tener en cuenta que por ejemplo las pruebas de imagen son fotos estáticas y en un momento. Seguro que muchos pacientes se han realizado una radiografía o una resonancia tumbado en reposo y en esa posición no le dolía nada. En cambio, estando de pie, o caminando si le duele. Por eso la importancia de saber bien lo que nota el paciente y de una buena exploración. Y a veces lo que nos encontramos en las pruebas, son hallazgos casuales que no justifican el problema del paciente.
La primera causa de consulta son los dolores de espalda, bien a nivel cervical o lumbar, derivados principalmente de malos hábitos posturales, sedentarismo y estrés. En estos casos, tras el tratamiento de fisioterapia para quitar el dolor proponemos una serie de ejercicios para prevenir la aparición de nuevos dolores. También ejercicios de pilates en los que somos expertos (tenemos más de 200 referencias en Google). Otras causas por la que más nos buscan es por lesiones deportivas, esguinces, roturas fibrilares a nivel muscular, tendinopatías sobre todo de hombro y rodilla.
Lo recomiendo a toda la población en general. Desde niños a partir de los 14-15 años, hasta los más mayores de casa.
La gimnasia para mayores, es otra área de trabajo importante para nosotros. En los grupos de gimnasia para los más mayores, realizamos un trabajo en los aspectos que más se necesitan en estas edades, tales como el equilibrio, el fortalecimiento general para tener una autonomía e independencia. Con la edad vamos perdiendo fuerza, aparece la sarcopenia (pérdida de masa muscular) y esto conlleva una pérdida de fuerza muscular, por ejemplo, en las piernas. Cada vez cuesta más subir escaleras, o cuesta más levantarse de una silla. Por eso, los ejercicios de fuerza son importantes.
La movilidad articular es otro aspecto importante a trabajar, ya que en estas edades la patología principal que más limita es la artrosis, limitando los movimientos corporales y provocando dolor, incluso caídas fortuitas que se podían haber evitado.
Y por supuesto también el trabajo de sociabilización, generando un grupo más allá de la actividad física y buscando las relaciones personales ya que también a veces otro problema que se da es la soledad y como consecuencia la depresión.
Buscamos unos objetivos generales a conseguir importantes para todos y a todos los niveles: equilibrio, fuerza, movilidad, coordinación y sociabilización. Pero no nos olvidamos de las necesidades individuales de cada alumno tan importante en edades avanzadas, previo al inicio de la actividad se le hace cuestionario de salud, y de las carencias o necesidades del alumno, de forma que en las clases se adaptan los ejercicios a cada uno, facilitando o complicando el ejercicio a sus necesidades por patología o condición física.
Sí, rotundamente sí. Tenemos una labor fundamental en la prevención. Fundamentalmente recibimos a gente con lesiones, pero una vez diagnosticada y tratada la lesión buscamos cuál fue la causa y proponemos un trabajo preventivo, que se basa fundamentalmente en estiramientos y ejercicios. Lo que proponemos es un plan de ejercicios que le realizamos en sesiones individualizadas a modo de entrenamiento personal, en el que enseñamos a realizar los ejercicios de manera correcta.
Sí, un trastorno bien mental, sea estrés o problemas mayores o una patología visceral o malos hábitos alimenticios o un mal posicionamiento de nuestro cuerpo para influir a nivel general, por eso escuchar al paciente y hacer una buena anamnesis nos va a permitir hacer un trabajo global.
La diatermia es una sistema que ayuda a recuperar una lesión o un problema del aparato locomotor de forma más rápida. Reduce el tiempo de recuperación. Es la emisión de radiofrecuencia en un rango de 0.5 a 2 7.12 MHz. También se conoce como TECAR que responde a Transferencia Electromagnética Capacitiva y Resistiva.
Para conocer más, puedes pinchar aquí.
La cara de satisfacción de nuestros pacientes cuando se sienten escuchados de verdad y entendidos, cuando somos capaces de resolver su problema de salud y ayudándoles a ser autónomos o cuando les damos las orientaciones necesarias para evitar recaídas.