Los cuidadores de enfermos dependientes, los grandes olvidados
Los cerca de 1,3 millones de personas cuidadores de enfermos crónicos dependientes, que además son enfermos pluripatológicos, suponen un "coste social oculto" en la atención a este tipo de pacientes. Además del coste personal que ello implica, en términos económicos, el valor de este trabajo no remunerado representa entre el 3 y el 5 por ciento del PIB español.
Así lo pone de manifiesto un estudio elaborado por la Universidad de Castilla La Mancha y presentado en la ponencia "Costes invisibles de las enfermedades" por el doctor en economía de la Universidad de Castilla La Mancha, Juan Oliva, en el VIII Congreso Nacional de Atención Sanitaria al Paciente Crónico, celebrado en Madrid.
La falta de reconocimiento de este sector, según el especialista, impide abordar con una visión integral el coste social que suponen las enfermedades crónicas. A su juicio, se hace necesario plantear la cuestión de un modo más acorde con la realidad, yendo más allá de las cuestiones puramente sanitarias. Es decir, sería necesario incluir tanto la valoración económica del papel del cuidador como su reconocimiento social.
A la hora de plantear cualquier programa, estrategia o política relacionada con personas dependientes, "no se puede pasar por alto la importancia que tiene la red de apoyo familiar en España, ya que en caso contrario tropezará constantemente con ineficiencias e iniquidades que erosionará el bienestar de los ciudadanos", concluye.
Proyecto de atención a pacientes pluripatológicos premiado por CNIS 2016
Osakidetza ha sido reconocida en la VI edición de los Premios CNIS 2016, celebrados en Madrid la semana pasada, con el premio “Proyecto Europeo más Innovador” por su trabajo con pacientes pluripatológicos. Su proyecto promueve un modelo de atención integrada a pacientes con pluripatologías mediante TICs, dentro del proyecto europeo Carewell. En colaboración con ellos trabajan diversas organizaciones como OSI Tolosaldea, OSI Uribe, OSI Bilbao-Basurto, OSI Barrualde-Galdakao, OSI Araba y el Hospital Santa Marina.
Este modelo organizativo para pacientes con necesidades complejas se orienta a mejorar el cuidado y la asistencia sanitaria a través de tres líneas de actuación: la coordinación y comunicación entre profesionales, prestación de asistencia en el domicilio del paciente en base a su capacidad de autocuidado y la autogesión de la enfermedad, gracias a la ayuda de las tecnologías de la información y la comunicación.
En el proyecto Carewell participan un total de siete países y se enmarca dentro de las líneas estratégicas para abordar los retos de la vejez, las enfermedades crónicas o la dependencia, con el objetivo de mejorar la atención y la calidad de vida de los pacientes geriátricos con técnicas basadas en las nuevas tecnologías.