La diplopia es una patología en el ámbito de la oftalmología que se caracteriza por visión doble, debida a que el cerebro no procesa las imágenes percibidas por el ojo derecho e izquierdo, para formar una sóla imagen. Entre las causas de la diplopia pueden estar los trastornos de los músculos oculares, la existencia de tumores en el cerebro o en el ojo, problemas de circulación sanguínea, etc. Es importante su diagnóstico correcto, ya que la diplopía puede ser síntoma de la existencia de patologías más graves en la vía óptica, en el cerebro o en el ojo.
Las causas son múltiples, entre ellas:
El diagnóstico inicial de la diplopía conllevará la realización de pruebas de pantalla doble, de análisis de movimientos oculares, test de Lancaster, etc. Una vez que se intuya cuál es la causa, se pueden completar con análisis de sangre, resonancia magnética, angiografía, electromiograma o tomografía computarizada.
Su tratamiento dependerá de la causa que la provoca: