Una persona maravillosa un gran cirujano en mi caso una operación total de cadera y ha salido todo bien sin complicaciones . Me ha cambiado la vida. Muchas gracias a él y a todo su equipo
En mi caso nada. Todo perfecto
Puntualidad | |
Atención al paciente | |
Acierto del diagnóstico | |
Acierto del tratamiento | |
Lista de espera |
Su falta de educación no solo hacia mí sino hacia mi propia madre ya que cuando un ser querido está enfermo, todo tu mundo se desmorona y se le suma la impotencia de no poder hacer nada. Y, si encima, damos con profesionales de esta talla la cosa no mejora. Su falta de empatía y de escucha al paciente. La prepotencia a la hora de dirigirse y explicar de mala gana lo que sucede. Su flaco favor a una profesión tan bonita como es la medicina. Su rechazo a escuchar. Su poca capacidad de autocritica.
Su rechazo a escuchar. Su poca capacidad de autocritica. Su apatía. Su incapacidad de tacto. Su rechazo a la responsabilidad en la toma de decisiones… Y una larga lista es el resumen y la definición exacta de lo que un profesional que trata con seres humanos no debe ser. En 10 minutos sentó cátedra de cómo no deben ser los futuros M.I.R.
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