Entrevista a Nicola Tartaglia, urólogo, andrólogo y experto en Salud Sexual en Barcelona

"La mayoría de los pacientes acude por disfunción eréctil, es decir, por la dificultad en obtener o mantener una erección satisfactoria durante el coito. Es una patología multifactorial que interesa a una franja de edad siempre mas amplia, desde jóvenes a gente mayor."

Nicola Tartaglia es urólogo por el Policlínico Umberto I de la Universidad “Sapienza“ de Roma, Italia.  Es especialista en trastornos de la sexualidad, tales como disfunción eréctil, eyaculación precoz, falta de deseo sexual, cirugía funcional y estética de los genitales masculinos. Además, es experto en salud sexual y fertilidad, con titulación como consultor en sexología otorgada por el Instituto de Sexología Clínica de Roma.

¿Cómo decidiste dedicarte a la salud sexual?

No hay nadie con un problema sexual que sea realmente feliz. Siempre he estado convencido. Hay patologías graves y debilitantes pero que afectan solo en momentos puntuales el día día del paciente. Con la sexualidad es diferente, esta es como un filtro a través del cual la persona mira durante todo el día, los siete días de la semana.

En otras palabras la salud sexual es una condición imprescindible para un correcto estado de salud y una completa satisfacción personal.

Desde que acabé la carrera tuve claro que, tanto en el sistema sanitario público como en el privado, hay un vacío importante en tema de trastornos de la sexualidad. Profesionales de varias especialidades asumen pacientes con dificultades en la sexualidad sin tener las herramientas adecuadas para un diagnostico y un tratamiento personalizado. Devolver a la sexualidad la importancia merecida en el panorama médico y poder dar una respuesta decisiva a estos pacientes, esta es mi motivación.

¿Cuáles son las patologías urológicas que más tratas en tu consulta?

La mayoría de los pacientes acude por disfunción eréctil, o sea la dificultad en obtener o mantener una erección satisfactoria durante el coito. Es una patología multifactorial que interesa a una franja de edad cada vez más amplia, desde jóvenes a gente mayor.

Otro problema muy difundido y a menudo relacionado con la disfunción eréctil, es la falta de libido. La falta de libido si no es tratada puede llegar a ser causa de depresión y crisis de pareja. Muchos pacientes acuden también con trastornos de la eyaculación como la eyaculación precoz o anorgasmia, o la enfermedad de Peyronie que consiste en la desviación del pene en erección, debida a la formación de una banda fibrosa en la túnica albugínea de los cuerpos cavernosos.

¿Con qué tecnologías se puede contar hoy en día para el diagnóstico y el tratamiento de la disfunción eréctil?

El diagnóstico empieza con una atenta recogida de datos personales, de pareja y sociales. Además cuenta con pruebas aptas a identificar causas orgánicas o emocionales. Una prueba crucial es el estudio eco-doppler peneano con inyección de prostaglandinas. También se suele realizar la rigidometría peneana nocturna, un estudio que analiza las erecciones nocturnas y que se suele proponer cuando el paciente ya no logra ver las erecciones matutinas como un tiempo.

Respecto al tratamiento, es fundamental corregir los factores de riesgos, ayudar a elegir los tratamientos de otras patologías que afectan la erección. Además se utilizan técnicas modernas y mínimamente invasivas como las ondas de choque o la inyección de centrifugado plasmático autólogo rico en plaquetas para potenciar la vascularización y regenerar los cuerpos cavernosos.

¿En qué consiste la terapia de pareja? ¿Cuándo es conveniente hacerla?

Hay situaciones en donde salvar una pareja parece una empresa imposible. El secreto es verla como una única entidad, como un único paciente al que saber dar respuestas satisfactorias y decisivas para ambos miembros. Aunque haya aparentemente falta de libido por parte de uno, o el hombre sufra una deficiencia eréctil, siempre se recomienda un camino terapéutico juntos, puesto que la pareja representa un sistema en el que los pensamientos y las acciones de uno influyen directamente sobre el otro. Cuando hayan dificultades, proponerse como pareja para buscar juntos la mejor solución cuanto antes posible puede ser la clave del éxito.

¿Cuales consejos generales quieres dar a tus futuros pacientes con problemas en ámbito sexual?

No demorarse. Cuál sea el motivo, quedarse a la espera que el problema se solucione solo es un error. Por nuestra cultura y costumbre no solemos pedir ayuda para problemas sexuales excepto cuando estos hayan llegado a ser insostenibles. Aplazar la terapia añade malestar psicológico y tensión en pareja y los miembros acaban alejándose y disminuyendo la comunicación. Cuiden sus parejas como si fueran ustedes mismos.