Nunca, jamás llega a su hora. Nunca. Siempre ponle un retraso mínimo de 15 minutos a la hora que debería llegar, esto es, ya puedes tener cita a las 8:30, que hasta cómo mínimo hasta 8:45 no la ves aparecer. Por lo que si tienes hora a las 9, al retraso que causen las atenciones al resto de pacientes, súmale el tiempo que ella llega tarde. No se implica con sus pacientes, ya puedes tener los análisis mal, que hasta que no están muy, muy, mal no te manda nada.
Puntualidad | ![]() |
Atención al paciente | ![]() |
Acierto del diagnóstico | ![]() |
Acierto del tratamiento | ![]() |
Precio | ![]() |
Lista de espera | ![]() |