Ha sido mi médico de cabecera durante los últimos quince años y, sinceramente, no puedo decir nada malo de ella. Se nota que la medicina y el cuidado de las personas son su vocación por su atención y preocupación constantes. Siempre me dedicaba el tiempo necesario, me escuchaba y me derivaba al especialista cuando era necesario. Siempre acertó con su diagnóstico. La echaremos mucho de menos y le deseo una feliz jubilación.
La maldita falta de recursos en la sanidad madrileña es inadmisible. No hay derecho a que seamos la comunidad que menos presupuesto dedica por paciente. Lo único que se le ocurre al gobierno de la Comunidad de Madrid es privatizar los servicios sanitarios.
Puntualidad | ![]() |
Atención al paciente | ![]() |
Acierto del diagnóstico | ![]() |
Acierto del tratamiento | ![]() |
Lista de espera | ![]() |