Miguel

Nada. En mi pueblo se dice que quién va allí, se muere.

Después haber crecido y perdido familiares mal diagnosticados, maltratados en urgencias, sedados hasta la inconsciencia en las habitaciones. Después de sufrir la suciedad habitual y perenne. El desencanto y pasotismos de sus profesionales. Después de llevar años sin pisarlo y no pensar hacerlo nunca más. Lo único que puedo opinar es que deberían cerrarlo, convertirlo en residencia o almacén y reciclar a su personal dándoles destinos separados para que no vuelva a suceder lo que está

Una parte del personal que, con su fuerza moral, lleva como puede el día a día y da un servicio más que normal. Ha pesar de tener compañeros (Muchos) que no se ganan el puesto.

TODO. Desangelado, tétrico, pequeño y sin organización... Al entrar por la puerta, el paciente se ve lleno de recuerdos de una época que creía pasada. La imagen que evoca es la de un antiguo centro de tuberculosos o preventorio. Su responsable, D. Miguel Angel Herrero Olivares (http://masquemedicos.com/medico-de-familia_guadarrama/miguel-angel-herrero-olivares/) hace más vida de concejal que de médico y lo desatiende. Y como ostenta los dos cargos. Pueden imaginarse de que sirve reclamar

Lo sentimos, no podemos publicar el texto de esta opinión, porque según nuestros abogados contiene comentarios que pueden considerarse injuriosos.