Un gran profesional que no olvida el trato con el paciente. Amable y cercano. Sin lugar a dudas con él el cambio de nombre de "médico de cabecera" a "médico de familia" está más que justificado, porque es el médico de la familia y se gana la confianza de todos. Mis hijos que son pequeños le llaman "el médico simpático". Ojalá no le muevan nunca de Villalba.
Puntualidad | |
Atención al paciente | |
Acierto del diagnóstico | |
Acierto del tratamiento | |
Precio | |
Lista de espera |