Luis

Nuestra experiencia fue lamentable: No conocía los trámites necesarios para nuestra situación pero en lugar de admitirlo y buscar soluciones, nos dijo que ella se encargaría de todo. (Obviamente no lo hizo) Lo más grave, sin embargo, fue su tratamiento médico: después de leer los informes de una paciente oncológica terminal con fallo hepático fulminante, le recetó nolotil y "un caldito". Todos los profesionales que consultamos después lo calificaron como "una barbaridad".