Es, sencillamente, la peor decisión que he tomado nunca. Me hice allí varios empastes, el mismo día, por aprovechar la atención rápida y evitar la espera en mi dentista habitual. Perforó cada pieza sin ningún cuidado, en tiempo récord y sin compasión. Hacía treinta años que no sufría un dolor de muelas; Bustamante los ha devuelto a mi vida. Temo que uno a uno, cada empaste va a derivar en una endodoncia. Me van a faltar años para terminar de arrepentirme de haber ido. No lo recomien
Puntualidad | |
Atención al paciente | |
Acierto del diagnóstico | |
Acierto del tratamiento | |
Precio | |
Lista de espera |