Nada. Lo bueno para él es que juega con el desconocimiento de la pareja en materia de infertilidad. Aunque eso tiene sus riesgos. Y lo bueno para él es que cuando te das cuenta de su negligencia e inmoralidad, ya has invertido un dineral, tiempo, esfuerzo... para nada.
Solo le interesa hacer punciones, transferencias, tener pacientes, dinero, dinero y más dinero. Se preocupa por la cantidad, no por la calidad de su trabajo que, es donde vienen los buenos resultados. . Le importa un pimiento la calidad y el resultado de su trabajo, con lo cual lo hace mal. Después es un experto en justificar sus malos resultados echando la culpa a todo, menos a su pésimo trabajo. Resultado final: la pareja abandona destrozada a todos los niveles.
Puntualidad | |
Atención al paciente | |
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