Jaime

No puedo decir nada bueno de mi experiencia en su consulta del servicio canario de salud.

Trata al paciente con desdén. Debe creerse un ser superior, con una total ausencia de empatía.

Trata al paciente como a un ser inferior porque está endiosado. Me operó del menisco y no me dejó bien. Además, cometió un error en la receta que no quiso asumir y ni siquiera me pidió disculpas. Es un impresentable.

Hay una pantalla de televisión enorme en la sala de espera, con muebles de diseño. Han invertido mucho dinero en la decoración del establecimiento.

Me hicieron esperar más de una hora porque colaron a dos pacientes delante de mí sin darme ninguna explicación. La primera no tenía cita. La segunda llegó media hora después y la hicieron pasar casi inmediatamente. Cuando la dentista exploraba mi boca sentí que lo hacía con tensión y con poco tacto. Quizá estaba agobiada por la cantidad de trabajo. Me cambiaron la fecha de la cita sin consultarme. Los precios me parecen muy elevados. En definitiva: no la recomiendo a nadie que tenga amor propio.