Pésima atención. Fui para una quiropodia. Me atendió de mala manera como si estuviera enfadado. No tardó ni cinco minutos, tenía mucha prisa porque antes de entrar yo vió a dos personas a las que saludó efusivamente y supongo que quería acabar enseguida para atenderles. Me sugirió hacerme unas plantillas y operarme por una uña encarnada y se encargó de dejar claro que mi sociedad eso no lo cubría y tendría que ser de forma privada. Antes de calzarme, ya estaba junto a la puerta abierta esperando a que me fuera. Lamentable.
Puntualidad | |
Atención al paciente | |
Acierto del diagnóstico | |
Acierto del tratamiento | |
Precio | |
Lista de espera |