Nada
La apatía, desídia, desconsideración y falta de vergüenza, educación y profesionalidad en este centro es evidente, tanto del personal administrativo como sanitario, una "señora" rubia y un tipo con alopecia en la recepción se llevan la palma. El sector público debería estar auditado por una entidad independiente, además los ciudadanos deberían ejercer su derecho a queja mediante la correspondiente reclamación (cosa que nadie hace). Animo a hacerlo.