Nada.
Nos han citado a las 15.30 para valorar a mi madre de 89 años el neurologo, Dr. Miguel Baquero Toledo. Hemos llegado y no había nadie en recepción. Nos citan a las 15.30 pero empiezan a las 16h. El doctor no se presenta ni avisa de que no puede venir y cuando le localizan por telefono, dice que no vendra hasta las 17h. Este es el trato a una paciente de esa edad con problemas de demencia. Trato denigrante. Espero que nadie tenga que volver a pasar por lo que ha pasado mi madre.