Entrevista a Marta García, fisioterapeuta con formación especializada en nutrición

"Tenemos algunos pacientes considerados crónicos que o bien tiene alguna hernia discal o alguna enfermedad degenerativa. Para esto uso sobretodo la terapia manual, siempre aprendiendo técnicas nuevas para que los tratamientos sean lo más personalizados posible."

Marta García es Fisioterapeuta, graduada en la Universidad Europea de Madrid. Cuenta con más de 15 años de experiencia en el tratamiento de pacientes en el ámbito privado. Entre los servicios que ofrece en su consulta se encuentran el tratamiento del suelo pélvico, dolores de espalda, recuperación de la marcha, preparación al parto, pilates, entre otros. Además cuenta con formación especializada en nutrición.

¿Cómo decidiste dedicarte a la fisioterapia?

Desde muy joven me ha gustado la rama biosanitaria, teniendo en cuenta que quería un trabajo autónomo para poder crearme mi empleo y mi negocio en el momento que estuviera preparada. Por eso en el 2007 me embarqué en mi centro propio.

¿Cuál es la mayor satisfacción que te aporta tu trabajo?

Ver como los pacientes con patologías difíciles y dolorosas se curan, mejoran su calidad de vida y pueden rehacer su vida.

¿Cuáles son los tratamientos o terapias más demandados por tus pacientes?

En general todo lo que tenga que ver con dolores cervicales, ya sea por traumatismo, accidentes… y dolores lumbares. Tenemos algunos pacientes considerados crónicos que o bien tiene alguna hernia discal o alguna enfermedad degenerativa. Para esto uso sobretodo la terapia manual, siempre aprendiendo técnicas nuevas para que los tratamientos sean lo más personalizados posible. No es lo mismo el dolor que aguanta una persona deportista que una señora mayor de 80 años. Así que cuantas más técnicas sepa, mejor será mi tratamiento.

Realizas fisioterapia a domicilio, ¿en qué casos la recomendarías?

Esto lo hago en los casos en los que el paciente no puede trasladarse al centro, exclusivamente. Personas recién operadas por ejemplo.

Eres especialista en fisioterapia de la mujer, ¿cuáles son las mejoras o beneficios que se han aportado a las mujeres en este ámbito en los últimos años?

A la mujer después del parto se la deja un poco olvidada generalmente, y en muchos casos con deficiencias en el suelo pélvico, con falta de fuerza, prolapsos, dolor en las relaciones sexuales…Por eso desde hace unos años los fisioterapeutas hemos hecho una incursión en este tema, ayudando a tonificar la musculatura desde la raíz del problema, evitando así la incontinencia urinaria y mejorando o curando las patologías que he mencionado.

¿Y el Bruxismo?

Es una patología cada vez más frecuente, ya sea por una mala mordida, que diagnosticará el maxilofacial o el odontólogo, o bien por un estado de nervios y ansiedad que hace que no descansemos bien por las noches, provocando un estado de presión sobre la articulación de la boca que desencadena muchos dolores faciales, de cabeza, mareos y hasta sordera. Para esto realizo en mi centro junto a mis compañeras, un tratamiento muy especializado en este campo que promete mejorar la sintomatología. Además, hacemos talleres mensuales de un día al mes, para que el paciente aprenda técnicas de automasaje y estiramientos, así como técnicas de relajación para dormir mejor.

Es cierto que el bruxismo conlleva varios factores a tener en cuenta, pero la fisioterapia mejora muchísimo los síntomas, y cada vez tenemos más pacientes que acuden por este tema.

¿Y ahora te dedicas también a la nutrición?

Sí, hace unos años vi que la alimentación era fundamental en la cura de muchas patologías, o que desde la alimentación también se podían curar muchas dolencias. Por eso empecé a estudiar e hice un Máser universitario. Desde entonces ayudo a personas que deben controlar su alimentación, propongo planes y estudio casos de personas con patologías crónicas que no tienen ningún tipo de lesión estructural, es decir, que no tienen a la vista ningún problema y que está, normalmente, relacionado con la mala metabolización de ciertos alimentos. Cada día tenemos más gente que viene exclusivamente a eso, y por ello también he formado, junto a una Psicóloga experta en este campo, unos grupos de apoyo para personas que necesitan hablar de sus problemas con la alimentación o su mala relación con la comida. Muchas veces, al decirlo en alto con personas que viven lo mismo, el tratamiento es efectivo por sí solo.

¿Qué recomendación le darías a los pacientes que sufren de algún problema o dolencia y aun así no acuden a la consulta de un fisioterapeuta?

En general, acudir al fisioterapeuta ya forma parte de la vida de muchas personas, pero normalmente acuden cuando ya están muy doloridos o la lesión en su momento agudo. Si incorporamos la prevención, nuestra calidad de vida va a mejorar cuantiosamente.