Enrique Tomás Marín

Nada bueno que añadir. No sé cómo nadie puede hablar bien de él.

Estando embarazada de 40 semanas, fuí a urgencias al perpetuo socorro y me mandó para casa con paracetamol, según él debía ser un problema de garganta o algo semejante. Afortunadamente consulté con otro especialista y me hicieron una analítica donde se vio claramente que había infección del liquido amniótico, me tuvieron que hacer cesárea de urgencia con mucho peligro para mi hija y para mí.
Este médico ha metido la pata con muchas pacientes, y debería estar sancionado por ello, somos personas.

Cercano, me tranquilizó bastante, amable

Que me diga estando embarazada que puedo tomarme una copita de vino o una cerveza de vez en cuando pero no emborracharme, que puedo tomar jamón pero del bueno y que no lo congele porque congelar jamón bueno es para matarme y que también puedo comer sushi de vez en cuando entre otras cosas… porque según él, en la dosis está el veneno… en fin…

No puedo decir nada bueno de este médico, todo han sido problemas.

No entiendo cómo tiene buenas reseñas, serán amigos o familiares, es un mal médico, con mi madre ha fallado en todo, ha estado super grave y ha tenido que ser intervenida por otro colega, que afortunadamente sabía lo que hacía y no como éste.

Estoy encantadisima con él, me opero ayer y sin dolor y sin nada lo recomiendo 1000% confianza,es muy muy bueno en su trabajo

Nada

No tengo nada bueno que añadir,la experiencia que hemos tenido con él,no ha podido ser peor.

Le agradecería que dejará de fumar en la consulta entre paciente y paciente.Se lo he pedido amablemente en varias ocasiones porque estaba embarazada y soy asmática y se ha reído literalmente de mi.
Es un doctor que va un poco sobrado, y debería de ser más meticuloso con los diagnósticos,conmigo y con mi embarazo ha metido la pata hasta el fondo y casi nos cuesta la vida.
No lo recomiendo en absoluto.

Buen profesional, cercano y claro.

Es un gran profesional

nada

Gran profesional

Nada

El mejor ginecólogo que conozco!!!
Siempre me pondré en sus manos.

Todo perfecto.

Su trato amable, sus explicaciones claras, su acierto. Todos los medicos deberían ser así