La Dra. Stefanía Mancinelli Reali es una profesional destacada en el campo de la salud capilar. Licenciada en Medicina y Cirugía, tiene una formación especializada en Medicina Estética y Antienvejecimiento así como en trasplante capilar. Cuenta con una extensa trayectoria profesional en clínicas privadas. Actualmente, ejerce como directora médica en Insparya Málaga con especialidad en tratamientos capilares y trasplantes.
Las bajas temperaturas debilitan la fibra capilar, provocando fragilidad y rotura. La recomendación es realizar tratamientos de bioestimulación o regeneración celular que nutran, hidraten y protejan tanto el cuero cabelludo como la unidad folicular. Si notas una caída muy drástica durante esta temporada o estás preocupado/a por la pérdida de densidad capilar, quizás necesites una valoración médica capilar para conocer tu diagnóstico y solución.
Es una buena época ya que en invierno se evita la sudoración y además el frío ayuda a aliviar la irritación o inflamación que pueda producirse posterior al microtrasplante capilar. Estos meses de invierno son los elegidos por la gran mayoría de pacientes para someterse a la cirugía capilar, con el objetivo de disfrutar en verano de su nueva imagen.
Sí, las temperaturas más bajas se recomiendan para la recuperación post trasplante, ya que favorece tanto la curación como la disminución del dolor o inflamación posterior al trasplante.
Para evitar la resequedad en el cuero cabelludo se pueden utilizar mascarillas hidratantes (siempre en puntas o parte media del cabello) una o dos veces por semana. También es recomendable tratamientos de bioestimulación infiltrados directamente en el cuero cabelludo, los cuales ayudan con su regeneración e hidratación.
Con el uso de mascarillas reparadoras, además de tratamientos regenerativos y bioestimulantes que actúan directamente en el cuero cabelludo para promover su reparación e hidratación.
Los cambios de temperatura extremos pueden debilitar el cabello, por lo tanto el uso de la calefacción puede generar un clima seco lo cual promueve la deshidratación, falta de brillo y fragilidad capilar.
El uso de champú que promueva tanto la limpieza del cuero cabelludo como su correcta hidratación, además de mascarillas regeneradoras y tratamientos que promuevan la bioestimulación y regeneración celular a nivel capilar.