Entrevista a Manuel Antonio Fernández, fundador del Instituto Andaluz de Neurología Pediátrica

"Un gran motivo de consulta en neuropediatría son los dolores de cabeza. Es algo que asusta a los padres y que en ocasiones, puede ser muy aparatoso. Para saber si a un niño le duele la cabeza de verdad, cuanto le duele y de que forma, hay que tener mucha experiencia profesional y mucha capacidad de empatizar con los niños"

Manuel Antonio Fernández es Licenciado en Medicina por la Universidad de Cádiz y especializado en Pediatría en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla. Se decantó por la Neurología Pediátrica en una de las mejores unidades del país y una de las pocas qeu cuenta con acreditación oficial. Es especialista en TDAH y en Trastornos de aprendizaje y conducta.

En el Instituto Andaluz de Neurología Pediátrica Ayuda a familias de chicos con Problemas de Aprendizaje, Conducta, Desarrollo (TDAH, Autismo...) y otros Problemas Neurológicos a determinar la causa y a darle la mejor solución posible para recuperar la alegría y la tranquilidad.

Tu especialidad médica es la Neuropediatría. ¿Por qué decidiste dedicarte a esta rama de la medicina?

Pues la verdad es que al acabar la carrera no tenía claro que especialidad escoger. Había sido alumno interno de Ginecología pero no me gustaban los quirófanos. Me gustaba la Medicina Interna por lo variada que es pero un profesor al que le tengo mucho aprecio me dijo que tendría problemas para poder trabajar de Internista por la saturación de la especialidad. Con todo esto, elegí Pediatría pensando que sería la Medicina Interna de los niños. Una vez dentro vi que era mucho más variada de lo que pensaba. Desde la atención primaria en el centro de salud a los cuidados intensivos en la UCI y pasando por todas las sub-especialidades pediátricas. Estuve dudando entre dedicarme a enfermedades infecciosas o neurología, pero al final, me decanté por esta última. Curiosamente, el profesor que me recomendó no hacer medicina interna, es neurólogo. No se si será casualidad o no pero al final salió así y estoy encantado de los resultados de la elección

¿En qué consiste la Neuropediatría?

La Neurología Pediátrica o Neuropediatría es la especialidad pediátrica que se ocupa de garantizar que el desarrollo neurológico de los niños es el adecuado y de actuar en caso de que se vea alterado. Igualmente, se ocupa de tratar todas aquellas afecciones del sistema nervioso que tengan lugar desde el momento de la concepción (inicio del embarazo) hasta el final del desarrollo independientemente de la edad a la que este ocurra. Aunque en nuestro país la edad límite de atención pediátrica son los 14 años, esa edad es aleatoria. Realmente, cuanto más desarrollado es un país, hasta más mayores ve un pediatra a los niños, incluso hasta los 18 años o más.

¿Cuáles son los principales trastornos que se abordan con la misma?

La verdad es que son muy variados. Haciendo un pequeño resumen, tenemos las 4 principales patologías.

Uno de los problemas más frecuentes en la actualidad son los trastornos del aprendizaje y la conducta. Entre todos ellos, el trastorno por déficit de atención o hiperactividad (TDAH) es el más habitual e importante de todos. También son relevantes las altas capacidades intelectuales y la dislexia

También han aumentado mucho en los últimos años las consultas por trastornos del desarrollo y la maduración. Entre ellos, los trastornos del espectro autista son los más importantes pero hay otros como el retraso psicomotor simple...

Otra de las patologías más habituales es la epilepsia. Aunque estamos acostumbrados a pensar que la epilepsia siempre se presenta como convulsiones, no es así. Nuestro cerebro puede hacer bajos los efectos de una epilepsia, cualquier cosa que sea capaz de hacer en condiciones normales (andar, hablar, leer...). Esto hace que el diagnóstico pueda ser muy complicado en algunos casos

Un gran motivo de consulta en neuropediatría son los dolores de cabeza. Es algo que asusta a los padres y que en ocasiones, puede ser muy aparatoso. Para saber si a un niño le duele la cabeza de verdad, cuanto le duele y de que forma, hay que tener mucha experiencia profesional y mucha capacidad de empatizar con los niños para entender qué es lo que les pasa. en la mayoría de los casos, no se trata de nada grave pero también puede haber migrañas desde una edad muy temprana que requieran tratamiento

¿Qué pruebas hay que realizar para un correcto diagnóstico de las diferentes problemáticas?

Una cosa que tanto las familias como los profesionales debemos tener clara, es que en neuropediatria, las pruebas más importantes son la entrevista con la familia, la exploración física del niño y la observación de su conducta. Con ello conseguimos alcanzar el diagnóstico de hasta un 75-80% de los casos. Por esto, la realización de pruebas complementarias se dedica a la confirmación de la sospecha inicial o a los casos en los que hay más aspectos que aclarar u otras opciones que descartar

Entre las pruebas más útiles están la resonancia magnética cerebral, que permite ver la estructura del cerebro y analizar si todo se ha desarrollado de forma correcta o si hay alguna lesión. También es importante el electroencefalograma, que permite evaluar el funcionamiento eléctrico cerebral en casos de epilepsia, problemas del lenguaje... Finalmente, me centraría en los importantes avances que el estudio de la genética está aportando a la neuropediatría. Está siendo vital en muchas áreas pero donde más resultados está alcanzando es en la evaluación de los trastornos del espectro autista. Hasta hace poco solo se encontraba la causa de un 25% y en la actualidad podemos llegar al 60--75% incluso.

¿Cuál son las posibles terapias o tratamientos, o bien las más destacadas?

Las opciones de intervención en Neuropediatria son varias.

En muchos casos es necesaria la instauración de tratamiento farmacológico como es el caso de las epilepsias, las migrañas, las meningitis... En otras en cambio, se requiere una intervención psicopedagógica como en los problemas del aprendizaje (dislexia, discalculia...). Hay situaciones que requiere de una atención logopédica especializada (retraso del lenguaje, trastorno del lenguaje, tartamudez...). O puede requerirse una intervención neuropsicológica como en los casos de maltrato infantil, retraso mental y similares. Por las características de los pacientes de nuestra especialidad las necesidades suelen ser multidisciplinares, o lo que es lo mismo, necesitan varias terapias conjuntas para poder tratar adecuadamente el problema.