El síndrome de ovarios poliquísticos conlleva un riesgo de padecer problemas de infertilidad. Al menos, así es con relativa frecuencia. Sin embargo, no todo está perdido. En este artículo veremos qué hacer cuando se detecta, así como cuáles son los tratamientos que pueden resultar eficaces para quedar embarazada con ovarios poliquisticos.
Para comenzar, el síndrome de ovario poliquístico, también denominado distrofia ovárica poliquística es una patología que ocasiona el agrandamiento de los ovarios y la aparición de varios quistes de distinto tamaño, que pueden alcanzar hasta un diámetro de 30 o 40 milímetros, en realidad folículos que han comenzado a madurar sin llegar a ovular.
Si hay sospecha de padecer este síndrome, cuyos síntomas son, por ejemplo, periodos irregulares, ciclos demasiado largos o hirsutismo, debe realizarse un examen, por parte del ginecólogo, para confirmar o no el diagnóstico. Una vez confirmado, sin embargo, hay que tener en cuenta que puede tratarse de un síndrome pasajero, pues muchas mujeres lo sufren de forma puntual, coincidiendo con algunas etapas de su vida.
¿Puedo quedar embarazada con ovarios poliquisticos?
Tras su confirmación, por lo tanto, la pregunta es si es posible quedar embarazada con ovarios poliquísticos, si bien la respuesta requiere matices de distinto tipo. Entre ellos, por un lado, se debe afirmar que se trata de un síndrome que puede causar problemas de infertilidad. Sin embargo, es posible aplicar distintos tratamientos, en función de cuál sea su causa, entre otros factores.
Así pues, de forma genérica puede afirmarse que es posible quedar embarazada con ovarios poliquisticos. Pero antes definamos esta enfermedad o, si se quiere, disfunción, que puede promover la obesidad o la resistencia a la insulina, pongamos por caso, con lo que puede hacer la diferencia controlar ambos factores de riesgo, o uno de ellos en caso de padecerse éste o aquel.
De seste modo, el control médico es esencial para encontrar un tratamiento certero, además de adecuado a las necesidades de cada persona. No en vano, es un síndrome que se asocia con la disfunción del eje hipotalámico-pituitario-ovárico o neuroendocrino. Será producida en cantidades excesivas la hormona luteinizante HL, por lo que los ovarios se estimulan de forma desordenada, ocasionando una mala ovulación. Es la razón por la que los ciclos suelen ser más largos de lo normal, y también la causa de que se produzca un aumento de algunas hormonas masculinas, en buena parte a causa del sobrepeso o la resistencia a la insulina.
Padecer estos desórdenes puede conducir a una ausencia de ovulación o a una ovulación de baja calidad que obedezca a principalmente a una deficiencia de progesterona. Sea como fuere, lo cierto es que se debe poner remedio a todo ello, bien mediante una vida más saludable que ayude a llevar una vida activa y alcanzar el peso ideal, como en lo que respecta a tratamientos basados en fármacos, en muchas ocasiones de forma complementaria.
En resumen, por un lado, el tratamiento depende de la causa, y además de la pérdida de peso se puede provocar la estimulación ovárica prescribiendo citrato de clomifeno y/o Metformina, aunque también es cierto que aumenta las probabilidades de embarazo múltiple. reemplazan o lo asocian con Metformina, un antidiabético.
Por otro lado, para concluir, debe afirmarse que no todas las mujeres que padecen dicho síndrome sufren de infertilidad. La clave está en identificar si se produce o no la ovulación, así como la calidad de la misma. En definitiva, entre las pacientes de ovarios poliquísticos, habrá mujeres fértiles, mientras otras lo serán pero en menor grado, pues únicamente podrán tener 2 o 3 ovulaciones al año. Igualmente, otras no podrán ovular. Un diagnóstico y tratamiento personalizados por parte del ginecólogo, por lo tanto, son los pasos a dar para conseguir el embarazo.
Imagen: Meche Hurtado en Wikimedia
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