José Ignacio Portilla Arroyo

El mejor médico siquiatra que conocí nunca .
Soy Antonio Cajete Fernández .
Te felicito por tu jubilación y por todo lo que me ayudaste , eres único y te considero un gran amigo .
Un fuerte abrazo , como siempre .

No encuentro nada que pueda mejorar .
Me deseo todo lo mejor .

Buen médico psiquiatra. Ayuda, muy interesado por sus pacientes.

Nada

Gran profesional,. Máxima puntuación..

A mí me lo recomendó una psicóloga, pues llevaba con depresión, 6 años, desde la muerte, de mí hermana. Me acertó a la primera y hoy estoy completamente bien! Tiene mucha. Humanidad. Paciencia y Experiencia. Por eso es tan bueno! Y no es nada caro!!!

Yo creo que no hay nada que mejorar!!!

.Muy buena persona y gran profesional, te transmite tranquilidad y tremenda empatia Soy enfermercoay

Soy paciente hace mucho tiempo jamasdejo dee buscar una solución

Sólo se pueden decir cosas buenas de este hombre, como profesional y como persona.Tiene unas virtudes humanas que no se encuentran fácilmente,necesarias para ser un buen médico como es,comentado por un gran número de personas que han ido a su consulta.

Persona muy educada. Trato amable y cercano. Buen Psiquiatra.

Pésimo. Fui por una depresión mayor y tras un único intento con un medicamento que no funcionó no quiso seguir tratándome ya que "no había nada que hacer en mi caso". Su total falta de recursos, interés y empatía reflejan poca profesionalidad y su abandono al paciente poca ética, aparte del peligro que supone abandonar a un paciente durante un episodio grave de depresión. Afortunadamente he visitado otro médico que sí ha mostrado interés y está siendo de gran ayuda.

Soy madre de una adolescente Ex-paciente suya. Como profesional deja mucho que desear, empatía cero y poco interés. La medicación que le recetó no iba bien y llegado el momento de cambiarla se la quitó sin sustituirla por otra, dejando pasar casi tres meses hasta la siguiente consulta, sin hacerle ningún seguimiento, y dejando a la paciente con sensación de abandono total. Las consecuencias fueron muy graves, pero por suerte encontramos otra profesional que sí se tomo en serio su trabajo.

Soy una persona que desde hace 40 años padece un trastorno bipolar. Tras el fallecimiento del psiquiatra que siempre me trató, estuve 3 años de psiquiatra en psiquiatra sin encontrar estabilidad. Finalmente fui a la consulta del Dr. Portilla, y en esta ocasión acerté. Soy su paciente desde hace 4 años, y para mi es un psiquiatra excelente y una gran persona.

Nada