El DIU (Dispositivo Intrauterino) es un método anticonceptivo no hormonal, que tiene una fiabilidad del 95 al 99% si se utiliza adecuadamente, de ahí la importancia que tiene la correcta colocación y retirada del DIU por un profesional, por lo general, un ginecólogo especializado. Se trata de un pequeño elemento de polietileno, de unos 4 cm, que se coloca en el interior del útero y puede contener cobre o bien soltar progestina, hormona sexual.
El DIU puede durar alrededor de 10 años, colocado en el organismo de la mujer, sin provocar efectos nocivos. Algunos modelos pueden durar hasta 14 años. La retirada del DIU se realizará por el ginecólogo en el momento que la paciente lo desee o también si se observa alguna situación anómala, tal como menstruaciones excesivas, posibilidad de embarazo, fiebre (que puede ser síntoma de infección), dolor de abdomen, o cualquier otra anomalía, que requerirá la acudida inmediata al ginecólogo para que él determine las medidas oportunas.
Hay situaciones en las que está totalmente contraindicada la colocación del DIU ya que se arriesgaría la salud de la paciente; entre las más destacadas están: Embarazo, cáncer de endometrio, tuberculosis y malestares pélvicos, menstruaciones dolorosas, fibromas en el útero, enfermedades pélvicas y enfermedades de transmisión sexual, infecciones del útero.