¿Cuándo puede ser necesaria una rehabilitación vestibular?
Las crisis de vértigo suelen cursar con taquicardia, náuseas, vómitos, zumbidos o movimiento del entorno o de uno mismo. Estos síntomas pueden ser leves pero también severos y acabar en incapacidad completa. La consulta con el especialista en otorrinolaringología es fundamental.
El vértigo posicional ocurre cuando la persona se marea cuando cambia de posición, y el mal de Menière que se caracteriza por pérdida auditiva y sensación de presión y de ruido dentro del oído y vértigo.
El sistema vestibular es la parte del oído interno y del cerebro que controla el equilibrio y el movimiento de los ojos. Cuando el oído interno está dañado por una enfermedad o un accidente, se pueden presentar desórdenes que requieren una rehabilitación vestibular.
Los síntomas que sugieren que se necesita una rehabilitación vestibular pueden ser mareos, inseguridad, falta de equilibrio, vértigos y náuseas. De hecho, las personas que lo sufren suelen ser propicias a caerse.
En ocasiones, lo síntomas se confunden con problemas de visión, musculares o de memoria. Además, estos pacientes suelen sufrir de dolor de cabeza y musculares en el cuello y espalda, así como una sensibilidad mayor al ruido y a las luces fuertes. Estos pacientes suelen quejarse de cansancio, pérdida de fuerza y falta de concentración que pueden indicar la necesidad de una rehabilitación vestibular.