"Gracias al trabajo conjunto de traumatología y fisioterapia, en el caso del tratamiento de la escoliosis leve y moderada, estamos obteniendo resultados muy prometedores, sobre todo en cuanto a la no progresión de la curva, a la mejora de la rotación de la vértebra, descartando en estos casos la necesidad de corsé o acortando el periodo de utilización del mismo."
Aldara Rodríguez Garzón es Licenciada en Medicina y Cirugía egresada de la Universidad Complutense de Madrid, Traumatólogo especializada en Cirugía Ortopédica, con residencia en el Hospital 12 de Octubre. Actualmente es Responsable de la Unidad de Ortopedia Infantil del Hospital Sur y Coordinadora de la Unidad de Traumatología y Ortopedia en Onelife.
Onelife es un centro especializado en la prevención y tratamiento del dolor, compuesto por un equipo de profesionales multidisciplinares, que tienen como objetivo brindar los tratamientos y técnicas más avanzados, en una atención personalizada teniendo en cuentas las necesidades particulares de cada paciente.
¿Por qué decides dedicarte a la traumatología?
La vocación hacia la Medicina me llamó desde bien pequeña sin ningún nexo familiar cercano, y poco a poco, a medida que vas estudiando la carrera y haciendo prácticas en las diversas especialidades vas definiendo tu campo, y yo tenía muy claro que mi inclinación era hacia una especialidad quirúrgica. En mi caso, y estoy segura que por mi carácter y mi forma de ser, la traumatología es una especialidad que me ha llenado desde el principio.
La traumatología fundamentalmente es resolutiva, tanto en patología aguda como en el paciente que acarrea un dolor o una deformidad degenerativa de forma más crónica.
Pertenezco a un servicio muy potente y completo de Traumatología en Hospital Sur de Alcorcón de grupo Quirón, y nuestro campo de actuación es amplísimo, tanto en el ejercicio artroscópico de casi todas las articulaciones hoy en día (hombro, rodilla, cadera, muñeca y huesos del carpo, tobillo), cirugía protésica (prótesis de hombro, de rodilla, de cadera, trapecio-metacarpiana, de cabeza de radio), cirugía percutánea (rotura de tendón de Aquiles, luxación Acromio-Clavicular, alargamientos tendinosos), microcirugía (síndrome del túnel del carpo, tumores de estirpe neurovascular) y toda la cirugía traumatológica de fracturas, que son cirugías urgentes donde generalmente se requiere del uso de placas, tornillos o clavos para reestablecer la anatomía propia del miembro afecto.
Por eso cuando, dentro de la ignorancia propia del que no se mueve profesionalmente en nuestra especialidad, nos ponen la etiqueta de “carpinteros” en el mejor de los casos, yo la cambiaría por la de “escultores”, salvando la distancia justa.
Eres especialista en ortopedia infantil. ¿Cuál son las principales afecciones en los más pequeños?
La Ortopedia y Traumatología Infantil es una subespecialidad de la traumatología muy peculiar. Como todo profesional que se dedique en exclusiva a los niños me dará la razón en que las patologías y características anatómicas propias de la edad infantil distan de una forma abismal de cómo se comportan las mismas entidades en adultos.
Fundamentalmente las consultas de Ortopedia Infantil se basan en aclarar si el comportamiento del aparato locomotor que está desarrollando el niño en ese momento es algo normal o no, y explicar a los padres los amplios rangos de normalidad que puedan tener ciertas deformidad propias de los niños, que irán evolucionando de forma natural hacia lo que un adulto considera como normal.
Las patologías más frecuentes que tratamos en la edad infantil son: el pie plano/cavo, dismetrías y alteraciones angulares y rotaciones de los miembros inferiores, escoliosis idiopática y curvas compensatorias, varo/valgo de pie y tobillo, Aquiles corto, alteraciones de la marcha, pulgar en resorte, tumoraciones benignas de partes blandas (quistes, gangliones), etc…
Háblanos un poco de la escoliosis, ¿en qué consiste y por qué se dice que cada vez es más frecuente?
La escoliosis es una desviación tridimensional de la columna, de origen desconocido en más del 80% de los casos, afectando sobre todo en edades por encima de los 10 años (escoliosis Adolescente) con una incidencia del 2-4% de los adolescentes, sin que las malas posturas o el uso de mochilas pesadas sean la causa desencadenante. Se ha detectado cierta carga genética en su desarrollo, y según nuevos estudios y evidencia clínica, estamos encontrando que la escoliosis puede ser debida también a una disfunción de la columna cervical alta, producida en las últimas semanas de gestación.
Un pequeño porcentaje de las curvas pueden progresar a curvas más graves (de más de 30º de desviación lateral) y requerir un tratamiento o bien corsé o incluso llegar a la cirugía en casos más severos. Es muy importante revisar periódicamente la escoliosis, sobre todo en pacientes con un potencial de crecimiento elevado o con historia familiar de escoliosis.
En Onelife hemos instaurado en varios centros escolares un protocolo de escoliosis, orientado a la importancia del diagnóstico precoz, higiene postural, fomentar el deporte, y ante el diagnóstico de escoliosis en edad escolar, un tratamiento individualizado, con resultados muy prometedores, fundamentalmente basados en la no progresión de la curva y en la mejora de la rotación anómala de la vértebra.
¿Cómo se produce la coordinación entre traumatólogo y fisioterapeuta a la hora de tratar la escoliosis? ¿Y en otros ámbitos?
Me enorgullece decir que el equipo de Onelife es único en este sentido. Uno de los motivos que nos unió a los profesionales que formamos Onelife es la necesidad imperiosa que existe de trabajar de una forma realmente estrecha entre las distintas especialidades que lo formamos.
En el caso de la traumatología, es básico un trabajo de fisioterapia diario, individualizado y con una supervisión estrecha, y en la mayoría de los casos por la demanda enorme de pacientes en la Sanidad pública, es imposible llevarla a cabo.
En concreto, en el caso del tratamiento de la escoliosis leve y moderada (menores de 35-40º de desviación) el equipo de fisioterapia reeduca de una forma muy innovadora al paciente al trabajar los distintos grupos musculares durante un periodo de tiempo variable, que suele durar más de 6 meses, con una serie de instrucciones que el paciente podrá trabajar por su cuenta desde casa. Estamos obteniendo resultados muy prometedores, sobre todo en cuanto a la no progresión de la curva (pacientes que sumaban más de 5º de desviación cada revisión), a la mejora de la rotación de la vértebra, descartando en estos casos la necesidad de corsé o acortando el periodo de utilización del mismo. Otros especialistas, ante la progresión de la curva o curvas con grados mayores de 25-30º, colocan de entrada un corsé 23 horas al día, al no tener la oportunidad de trabajar codo con codo con expertos fisioterapeutas como es mi caso.
Como ya se puede intuir, y haciendo referencia a su segunda pregunta, cuando se trata de un paciente postoperado o que requiere una recuperación tras una grave lesión del aparato locomotor, los largos tiempos de espera para rehabilitación y la saturación de los fisioterapeutas en centros públicos, pueden jugar un papel totalmente opuesto en la recuperación del paciente. Esa necesidad para con el paciente es parte fundamental del trabajo diario entre fisioterapeutas y traumatólogos.
¿Cuál es una de las principales satisfacciones que te aporta tu trabajo?
La traumatología en su gran mayoría de patologías a tratar es una especialidad curativa, muy gratificante al poder ofrecer al paciente alivio a su dolor, reinstauración de la movilidad del paciente, corrección de deformidades del aparato locomotor, sustitución de articulaciones degeneradas,…en resumen, como traumatólogo sé que doy calidad de vida al paciente.