“Tanto mis compañeros como yo tenemos ganas inmensas por seguir aprendiendo. Comentamos entre nosotros el manejo de pacientes, estudiamos e investigamos. Aparte de que somos un equipo médico, de enfermería, de laboratorio, de asistentes personales, somos ante todo un equipo humano con ganas de trabajar y ayudar a las parejas”.
Cristina García-Ajofrín es licenciada en Medicina y Cirugía, especializada en Ginecología y Obstetricia en el Hospital madrileño de la Paz. Su trayectoria profesional se orienta hacia el ámbito de la Reproducción Humana, completando su formación mediante Máster y enfocando su carrera profesional en dicha línea.
Creo que todos empezamos a querer ser médico porque nos apasiona el hecho de salvar vidas. Luego te das cuenta de que no es tanto el hecho de salvar vidas sino de trabajar por mejorar el bienestar de las personas. Una vez que ejerces te das cuenta de que con tu ayuda puedes contribuir a que las personas sean un poco más felices.
Una vez que inicié los estudios de Medicina la especialidad me empezó a gustar porque supone traer vida al mundo. Cuando me formé en reproducción humana y esterilidad me motivó el hecho de poder ayudar a parejas que tenían problemas. Los pacientes que atendemos son personas que vienen con mucha incertidumbre, desoladas y con una tristeza inmensa. Y creo que puedo aportar para hacerlos más felices.
En Instituto Bernabeu Madrid, las pacientes que tratamos han realizado, en muchos casos, tratamientos previos y llevan a sus espaldas una mochila llena de informes y fracasos. Vienen desoladas y la verdad es que, poder dar un halo de esperanza en la primera visita, me alegra muchísimo. Con la información que traen podemos investigar y nos obliga a exprimir el cerebro al máximo para ayudarles.
Tenemos en desarrollo una incipiente línea de investigación del estudio de los niveles de progesterona en fase lútea para relacionarlos con mayores posibilidades de embarazo y menor posibilidad de aborto. También me interesa el factor uterino y la realización de histeroscopias; el diagnóstico a través de ecografía tridimensional, el factor inmunológico y los factores del fallo recurrente de implantación.
El perfil humano que hay en la clínica. Se trata a las pacientes como pacientes, no como clientes. Se da una visión científica y honesta desde el principio y lo valoro de una forma muy positiva. Me gusta trabajar así y me complace que en la institución está bien visto trabajar así.
Vienen parejas con muchos tratamientos a sus espaldas, eres consciente de la dificultad y cuando lo consigues es una sensación magnífica. Y lo vemos más veces de lo que pensamos. Siempre pongo lo mejor de mí misma y cuando alcanzas el embarazo es maravilloso.
Hay momentos que no cambio por nada. Desde que la paciente se hace el test, cuando se realiza la primera ecografía y cuando luego vienen a presentarnos a su bebé.