"Tras tres tratamientos in vitro la gran mayoría de las pacientes suele conseguir un embarazo. Evidentemente, nuestro objetivo es que sea siempre lo antes posible pero, en ocasiones, no se consigue en el primer intento".
César Lizán es Ginecólogo experto en fertilidad y reproducción asistida, Director médico en Clínicas EVA, donde aporta sus conocimientos para la realización de todos los tratamientos necesarios para lograr el sueño de muchas mujeres y parejas, tener un hijo.
Clínicas EVA son una red de clínicas en toda España, con más de 40 sedes, y que se han posicionado como la red especializada en reproducción asistida más grande de Europa, ofreciendo a sus pacientes la comodidad de sentirse como en casa, y la seguridad de estar en manos de los mejores profesionales.
¿Por qué decidiste dedicarte a la reproducción asistida?
Contribuir a que una pareja consiga quedarse embarazada es algo muy especial y que reporta grandes satisfacciones. La verdad es que, desde estudiante, la ginecología ha sido siempre la especialidad que más me ha gustado; es muy completa porque te aporta conocimientos quirúrgicos, médicos, de técnicas de imagen… Dentro de la ginecología, cuando conoces el campo de la reproducción, es difícil no enamorarse de él. Pensar que todo lo que has aprendido puede ayudar a que una pareja consiga su sueño de ser padres, es una de las mayores motivaciones que he conocido.
Uno de los problemas con el que los médicos nos encontramos en ocasiones, es que las pacientes no siguen adecuadamente los tratamientos pautados. Esto en reproducción no existe. La motivación es tan grande que es excepcional encontrar a alguien que se olvide de cumplir perfectamente todas y cada una de las pautas dadas. Por ello, la sensación de trabajar en equipo con los pacientes es otro de los grandes estímulos de la reproducción.
¿Cuál es la mayor satisfacción que te aporta tu profesión?
Cada vez que tenemos un resultado positivo todo el equipo de Clínicas EVA (desde la asesora que sirve de nexo con el equipo médico durante el tratamiento, los biólogos, las enfermeras a los propios médicos), todos saboreamos una pequeña porción de esa felicidad que experimenta una pareja o una paciente.
¿Cuáles son las principales causas por las que una mujer no logra quedarse embarazada de forma natural?
Las causas son muy variadas. Haciéndolo sencillo, podríamos decir que alrededor de un 40% de las veces existe un problema de calidad del semen, otro 40% depende de distintos factores que afectan a la mujer (retraso de la maternidad, pólipos, miomas, septos uterinos, endometriosis, coagulopatías, factores genéticos…) y existe un pequeño porcentaje en el que no se encuentran causas claras. Este porcentaje es cada día menor porque cada vez somos capaces de estudiar más cosas y con mayor precisión, como puede ser desde la composición genética de los embriones hasta distintos factores que afectan a la receptividad endometrial.
¿Cuáles son los tratamientos de fertilidad más eficaces? ¿Cuánto tiempo tardan en llevarse a cabo?
Las técnicas más eficaces son aquellas que usan tecnología in vitro (de un laboratorio de reproducción asistida); esto abarca desde la fecundación in vitro convencional y sus distintas variantes, hasta el empleo de gametos de donantes.
El tiempo es menor de lo que la mayor parte de la gente cree; en unos 15 días se suele realizar todo el proceso.
En ocasiones, puede ser conveniente dejar la transferencia para un ciclo posterior y esto puede retrasar el proceso. También es importante resaltar que, en algunas ocasiones se necesitan corregir diversos factores antes del tratamiento para que las posibilidades de la técnica sean las mejores.
¿Qué tipo de pruebas médicas debe realizarse una paciente antes de someterse a un tratamiento de reproducción asistida?
Cada caso es distinto, pero las pruebas que necesitan todas las pacientes son: la valoración hormonal del tiroides (TSH), ovario (HAM principalmente) y prolactina; ecografía; seminograma; y análisis de posibles infecciones.
Algunas pacientes también requieren valorar sus trompas, realizar análisis genéticos o de factores que afectan a la implantación, estudiar el semen con más detenimiento, hacerse histeroscopias u otras pruebas complementarias.
Después de llevar a cabo los tratamientos de fertilidad ¿Cuáles son las posibilidades de lograr un embarazo?
Tras tres tratamientos in vitro la gran mayoría de las pacientes suele conseguir un embarazo. Evidentemente, nuestro objetivo es que sea siempre lo antes posible pero, en ocasiones, no se consigue en el primer intento.
Al afrontar una técnica de reproducción asistida, también es importante estar preparados para afrontar resultados no deseados y, por eso, en Clínicas EVA la asistencia psicológica está disponible para todos los pacientes de forma gratuita al inicio del tratamiento.
¿Durante el tratamiento la paciente puede mantener relaciones sexuales?
Durante las estimulaciones para una fecundación in vitro no es recomendable mantener relaciones a partir del cuarto o quinto día de la estimulación porque los ovarios alcanzan un tamaño mayor del habitual. Esto puede provocar molestias e, incluso, se puede llegar a producir la torsión del ovario, que es una complicación peligrosa pero muy rara.
En los tratamientos de inseminaciones o en la preparación para la recepción de ovocitos donados no suele haber problema en mantener relaciones. Aquí, la limitación suelen ser los 2 a 5 días de abstinencia sexual del varón antes de entregar sus gametos, que se recomiendan para unas condiciones óptimas del semen.
¿Es determinante la calidad ovárica para el logro de un embarazo? ¿Cómo puede mejorarse ésta?
La calidad de los óvulos viene determinada por factores genéticos, ambientales, hormonales… De todos los factores, el más importante es la edad de la mujer. Evidentemente, la edad no se puede cambiar y cada día es más complicado compaginar la vida de nuestra sociedad con la maternidad, con lo cual, en ocasiones, ser madre se demora en exceso.
Pero muchos otros factores sí pueden ser corregidos y ayudarnos en nuestro objetivo de conseguir el embarazo. Además, las técnicas de reproducción asistida nos permiten mejorar mucho las opciones de las parejas y conseguimos embarazos en pacientes sin trompas, sin ovarios, con endometriosis, con miomas, con tabiques en el útero, varones sin semen…
¿Cuándo se sugiere a la paciente recurrir a una donante de óvulos?
Cada caso es distinto y es difícil dar unas directrices generales. Es cierto, que la donación de óvulos es un tratamiento con unos excelentes resultados y que se realiza especialmente bien en nuestro país (de hecho, basta echar un vistazo al número de pacientes extranjeros que, cada año, acuden a centros españoles para someterse a esta técnica).
En Clínicas EVA intentamos siempre hablar claramente de posibilidades y porcentajes ajustados a cada caso concreto y cada técnica. Esto ayuda mucho porque, quizá si una pareja tiene más posibilidades de quedarse embarazada con una donación de ovocitos que con sus propios gametos, puede optar por esta técnica. O al contrario, hay parejas que, por muy escasas opciones que tengan con sus óvulos quieren apurarlas y nosotros ponemos todo lo que está en nuestras manos para que puedan conseguirlo.
¿Existe alguna diferencia en el tratamiento de fertilidad para una mujer que utiliza sus propios óvulos, y el tratamiento de una paciente que utiliza los óvulos de una donante?
Sí, son tratamientos distintos. Cuando una mujer utiliza sus óvulos tiene que someterse a una estimulación (habitualmente, pinchazos diarios durante unos 8-10 días) y acudir a controles ecográficos para controlar que sus folículos se están desarrollando adecuadamente. En la fecundación in vitro, cuando los folículos tienen el tamaño adecuado, se programa la punción y los ovocitos que se obtienen se fecundan en el laboratorio. Posteriormente, se programa la transferencia de los embriones tras comprobar su adecuado desarrollo. La transferencia puede demorarse para mejorar las posibilidades de las pacientes en algunos casos.
Cuando empleamos óvulos de donante, la paciente debe preparar adecuadamente su endometrio para que esté receptivo en el momento de poner los embriones. Esto suele resultar mucho más fácil y puede hacerse usando ciclos naturales de la paciente (sin medicación) o ayudándonos de tratamientos (que pueden ser parches o pastillas, habitualmente).
Como especialista en reproducción asistida ¿Qué recomiendas a las mujeres que quieren ser madres pero piensan que por su edad ya no es posible?
La edad, a día de hoy, y gracias a la vitrificación de óvulos propios y a la donación de ovocitos, no es una limitación técnica. Ahora bien, existe un consenso de la sociedad española de fertilidad que limita los tratamientos a partir de los 50 años. Este límite se propone porque tenemos que pensar que las complicaciones de los embarazos aumentan con la edad y que los niños tienen que tener la posibilidad de disfrutar de sus padres durante el mayor tiempo posible. Es algo que puede resultar discutible porque con los varones no se es tan estricto y porque cada caso merece una valoración individual.