Almax forma parte del grupo de medicamentos conocidos como antiácidos, que también tienen acción para neutralizar los ácidos biliares, cuando hay reflujo del estómago.
Se utiliza para tratar la gastritis, los trastornos de la digestión (dispepsia), acidez gástrica (hiperclorhidrias), las úlceras gástricas, duodenales, hernia de hiato y esofagitis.
No se tiene que tomar Almax si se tiene alergia a alguno de los componentes, padece Alzheimer, o presenta hemorragias del aparato digestivo, retención de líquidos (edema), hemorroides, o problemas durante el embarazo con el hígado. En caso de embarazo se recomienda consultar con su médico.
Se tendrá que tener cuidado con su ingesta si tiene una enfermedad grave del riñón, en menores de 12 años, también en ancianos o con las dietas bajas en fósforo.
Como recomendación, la ingesta de Almax, se debe distanciar dos o tres horas de la toma de cualquier otro medicamento, ya que modifica la capacidad de absorción del organismo.
A vigilar: Hemopatías
Contraindicado: Diarrea, Lactante/niño, Otros estados patológicos, Hipertensión, Insuficiencia cardiaca
Precauciones: Embarazo, Insuficiencia renal, Lactancia, Otros estados patológicos, Personas ancianas, Insuficiencia renal