Entrevista a Anabella Lara Redondo

"El patrón alimentario permite intervenir en enfermedad, ayudando a revertir muchas de ellas, a paliar los síntomas en otras, pero además es un éxito en el objetivo de preservar el bienestar físico, reduciendo las probabilidades de perder salud".

Anabella Lara, es especialista en Dietética y Nutrición Humana, en proceso continuo de formación. Uno de sus principales objetivos es sensibilizar sobre la importancia en la mejora de los hábitos alimenticios, como forma de conseguir no sólo un peso ideal, sino de mejorar la calidad de vida de la persona, protegiéndola frente a enfermedades.

¿Cómo decidiste orientarte a la Dietética y Nutrición?

Cuando consultaba las carreras universitarias a mis 17 años, me topé por casualidad con una profesión relativamente nueva, que casaba perfectamente con mi preocupación por la prevención de enfermedades. En un primer momento, me inclinaba hacia la salud mental, pensando seriamente en elegir psicología como profesión, pero al cruzarme con esta rama desconocida para mí en aquellos años, no dudé que era mi elección de estudios.

Mucha gente me comentaba que podría elegir enfermería, medicina o fisioterapia para satisfacer mis ganas de tratar enfermedades. Pero me atraía mucho el poder de la prevención en salud. Lo que debería ser la atención primaria en sanidad, prevenir enfermedades. Entonces me di cuenta, el médico, el enfermero, trabajan cuando hay enfermedad. El patrón alimentario permite intervenir en enfermedad, ayudando a revertir muchas de ellas, a paliar los síntomas en otras, pero además es un éxito en el objetivo de preservar el bienestar físico, reduciendo las probabilidades de perder salud.

¿Cuál es la mayor satisfacción que te aporta tu trabajo?

Trabajar con personas y valorar cada caso con lupa para que el tratamiento sea eficaz y observar en cada paciente, que las horas de estudio, de renovación continua en las herramientas a utilizar, ayudan directamente a que su calidad de vida mejore considerablemente.

¿Cuáles son los tratamientos o terapias más demandados por tus pacientes?

Problemas por exceso de peso, es lógico debido a la pandemia mundial de obesidad que existe. Además, siempre se ha asociado al Dietista-Nutricionista con dietas para perder peso.

Pero actualmente y cada vez con más frecuencia, la población general va haciéndose eco de la amplia variedad de intervenciones alimentarias que existen. Y las que más demandas después del sobrepeso son:

• Patologías digestivas tipo: colon irritable, gastritis, Chron, ulceras, 
• Alergias, intolerancias alimentarias
• Educación alimentaria en niños
• Rendimiento deportivo, preparación para competición
• Trastornos alimentarios
• Etapas vitales: embarazos, postparto, menopausia...

Entre los tratamientos que ofreces en tu consulta ¿Cuál de ellos es el más complicado de realizar?

Aquellos pacientes que vienen tras muchos años de dietas milagros, sedentarismo, efectos rebote y vuelta a repetir dietas milagros. Su metabolismo se encuentra resistente y la dificultad de eliminar el exceso de grasa es mayor. Lo bueno de estos casos es que con paciencia y haciendo bien las pautas indicadas se puede revertir el "metabolismo ralentizado". La parte negativa, que en muchas ocasiones se buscan resultados rápidos más que un cambio de vida a largo plazo, y esto hace que muchos no lleguen a culminar el cambio y vuelvan a "terapias vende humo" que no tienen en cuenta los efectos silenciosos y negativos para la salud de la persona.

¿Qué recomendación le darías a los pacientes que sufren de algún problema o dolencia y aun así no acuden a la consulta de un especialista?

Nuestra profesión está muy contaminada de consejos amimefuncionistas: "mi prima dice", "mi cuñado le sirvió", "la revista tal ha dicho", "la novia de Pepito toma" ... Lo que quiero transmitir con esta idea es que poner a prueba nuestro cuerpo con consejos que no se basan en la evidencia científicaca ni están bajo la supervisión de profesionales cualificados, puede tener efectos muy negativos a largo plazo para la salud. El problema es que no vemos la comida como algo que dañe, pero ésta puede ser nuestra medicina o nuestro veneno. Y actua de un modo tan silencioso que no te das cuenta.

Si cuando tienes que operarte, nunca recurres a un "experto en aperturas corporales", si de verdad te interesa conocer el beneficio que puedes obtener educando tu estilo de vida acude a profesionales titulados y formados para ello.