La técnica “Exposición en Vivo” es clásica y se considera incluida en las terapias psicológicas de primera generación. Es de uso habitual en las consultas clínicas puesto que presenta un porcentaje muy alto de resolución de conflictos personales sobre todo en aquellos casos que se presenta un índice alto de ansiedad, de fobia o ataque de pánico y en aquellas personas que evitan estímulos y se bloquean ante ellos. Se suele utilizar adherida a la exposición en imaginación y propiamente a la técnica desensibilización sistemática de Wolpe. No hay una evidencia que concluya como modelo teórico que cambios específicos se producen en la persona durante la explicación pero no se puede entender sin conocer los mecanismos cognitivos y emocionales que utiliza la persona en sus acciones.
Pautas de aplicación
- Siempre debe de hacerse con jerarquías de acciones graduales no una exposición a los estímulos estresores completa.
- La exposición debe ser específica estando muy bien definido lo que se va a hacer, las situaciones temidas que pueden surgir y hasta donde vamos a llegar.
- Realizarlo con frecuencia, si solo se intenta una vez la programación no es eficaz. El entrenamiento sea un resultado bueno o malo es fundamental.
- No practicarla acompañado y como mucho si tuviera que organizarse así solo con un acompañante. Se deben de completar al menos dos prácticas en solitario.
- Importante no menospreciar los logros conseguidos. Se puede realizar una tabla de avances con el paciente.
- Explicar que la ansiedad estará presente aunque sea en un gradiente muy pequeño y que no debemos de desanimarnos por ello. Lo raro sería no sentir ansiedad ya que estamos enfrentándonos a nuestros miedos.
- Recordar las estrategias de afrontamiento aprendidas en la consulta como la respiración, la inervación vagal, el cambio de pensamiento…
- Tener en cuenta si el paciente presenta ansiedad anticipatoria trabajarla antes porque si no la exposición ya irá influida por un nivel alto de ansiedad previo.
Si quieres saber más sobre la técnica puedes consultar a los mejores psicólogos en Barcelona, Palma de Mallorca o en tu ciudad.
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