Entrevista a Karina Muñoz Rodríguez

"lo que más se suele pedir -en un procedimiento penal- es hallar la relación entre la enfermedad mental y el delito cometido: no una persona que delinque, por el mero hecho de padecer una esquizofrenia, debe ser declarado inimputable; al contrario, si la misma persona con esquizofrenia está estabilizado y no habían síntomas psicóticos activos en el momento de cometer el delito, esa persona es tan culpable como otra sana"

Karina Muñoz Rodríguez es una psiquiatra especializada en el tratamiento psicofarmacológico de los trastornos emocionales y las enfermedades mentales graves, realizando un abordaje en todas las edades. Los temas de violencia de género y bulliyng no le son ajenos, participando de forma activa en el Foro de Diálogo CEAVIGAL, para elaborar protocolos de actuación en dicha línea.

¿Cuál es la misión del psiquiatra forense?

La psiquiatría forense consiste fundamentalmente en la aplicación de los conocimientos de psiquiatría (es decir, sobre las enfermedades mentales y la conducta humana) para la resolución de las dudas que pueden tener los jueces y que son determinantes para tomar una decisión y dictar una sentencia.

¿El diagnóstico de un psiquiatra puede ser determinante en un juicio penal?

No siempre se nos pide un diagnóstico, porque es posible que el diagnóstico ya sea conocido antes de la comisión del delito; lo que más se suele pedir -en un procedimiento penal- es hallar la relación entre la enfermedad mental y el delito cometido: no una persona que delinque, por el mero hecho de padecer una esquizofrenia, debe ser declarado inimputable; al contrario, si la misma persona con esquizofrenia está estabilizado y no habían síntomas psicóticos activos en el momento de cometer el delito, esa persona es tan culpable como otra sana. Esa es la función del psiquiatra forense.
Pero nuestro trabajo no sólo se limita a intervenir en procedimientos penales, sino también en los civiles: también evaluamos casos de incapacidades, invalideces, custodias… pero generalmente aquellos casos que son más peliagudos y complejos de estudiar.

¿Cuáles son las enfermedades mentales que pueden ser diagnosticadas en criminales?

En realidad no hay enfermedades mentales exclusivas de los criminales, así como tampoco podemos considerar que todos los casos de esquizofrenia o de trastornos de la personalidad son iguales entre sí. Hay muchos más factores que debemos tomar en cuenta cuando se trata de explicar la criminalidad desde el prisma de la salud mental.
Sí podemos decir que, entre los criminales, hay mayor prevalencia de determinadas entidades: las toxicomanías y adicciones y algunos tipos de trastornos de la personalidad, por ejemplo, son habituales en este sector de la población, probablemente porque son problemas que predisponen al sujeto a delinquir.

Una investigación publicada por la revista Law and Human Behavior afirma que sólo el 7,5% de los delitos que han sido cometidos por personas con enfermedades mentales graves, tienen una relación directa con los síntomas de dicha enfermedad. ¿A su juicio un trastorno mental grave puede derivar comúnmente en una conducta delictiva?

No. Una conducta delictiva cometida por un sujeto con una enfermedad mental no tiene por qué estar forzosamente vinculada a tal trastorno. Precisamente esa es nuestra función: determinar si la patología mental tiene o no relación con un delito determinado, y si la tiene, cómo ha podido ocurrir tal causalidad.

En términos legales, es muy útil para la defensa de un sujeto con un trastorno mental que ha delinquido argumentar que sus actos se originan en la enfermedad mental. Nuestro trabajo en estos casos consiste en determinar, primero si realmente hay trastorno mental, y luego si tal trastorno ha tenido influencia en el delito y si el sujeto sabía que sus actos eran constitutivos de delito y las consecuencias que podrían derivarse de ellos.

Lo cierto es que en la práctica vemos que en la población penitenciaria con trastornos mentales graves, el delito no siempre tiene relación con la enfermedad.

Últimamente son muy seguidas las series de televisión de temática policial y de investigación de crímenes, en las que los psicólogos y psiquiatras juegan un papel fundamental. ¿Considera que el perfil difundido en TV sobre los psiquiatras forenses y las técnicas que utilizan, coincide con la realidad?

No debemos olvidar que la televisión es un medio de entretenimiento con argumentos y técnicas cada vez más espectaculares. La descripción televisiva del trabajo de los psiquiatras y psicólogos forense tampoco escapa de dicha espectacularidad.

Los métodos de exploración que empleamos no se diferencian mucho de los que se ponen en práctica ante nuestros pacientes: una entrevista clínica -con especial énfasis en los hechos que se juzgan- y una exploración psicopatológica acompañada de diversas pruebas y tests, todo ello con la finalidad de realizar un informe pericial completo en el que dar solución a las preguntas que tiene el Juez sobre el caso en cuestión (causalidad, riesgos y gestión de riesgos...); como peritos que somos, nuestro deber es auxiliar a la Justicia prestando nuestros conocimientos para la resolución de un procedimiento, y nuestro informe constituye una prueba más de todas las que se aportan, pero en ningún caso somos quienes ponemos el cascabel al gato.