La ansiedad

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Esmeralda  Vázquez Conchas Psicologo San Fernando Esmeralda Vázquez Conchas Psicologo San Fernando preguntó sobre
Ansiedad y estrés

La ansiedad es una reacción emocional que se da en todas las personas y que, bien entendida, nos ayuda a mejorar nuestra adaptación al medio social o laboral. Además de ésto, la ansiedad es la respuesta emocional que nos activa para actuar o huir ante una situación que percibimos como amenazante. Por ejemplo, si en época de exámenes, un estudiante no tuviera este nivel de ansiedad adaptativa, no se dispondría a estudiar.

Sin embargo, cuando el nivel de ansiedad, sobrepasa esos límites adaptativos, se convierte en un peligro para la salud física y psicológica de la persona. Es en este momento cuando sus reacciones emocionales constituyen un malestar clínicamente significativo para ella y comienzan a afectar negativamente al plano laboral, académico, social o familiar.

Se calcula que entre un 15% y un 20 % de la población padecen o padecerán a lo largo de su vida un trastorno ansioso. Lamentablemente, en muy pocas ocasiones hay una recuperación espontánea del problema. Lo usual es que si la persona que padece el trastorno no recibe tratamiento, sus condiciones se mantengan o empeoren. De este modo, es muy recomendable el tratamiento del problema lo antes posible, ya que existen estudios que avalan un mejor pronóstico de la enfermedad, si el tratamiento terapéutico tiene lugar en cuanto ésta se detecte.

Cuando una persona experimenta ansiedad, el profesional que la evalúa debe diferenciar ante qué trastorno de ansiedad nos encontramos: fobias específicas, fobia social, trastorno obsesivo- compulsivo (TOC), agorafobia, fobia generalizada… todos estos trastornos, tienen en común la respuesta de ansiedad de la persona ante diversos estímulos. En ocasiones, la ansiedad es también un componente importante de otro tipo de problemas: como disfunciones sexuales, adicciones, trastornos alimenticios, depresión,…

Las manifestaciones de la ansiedad varían sustancialmente de una persona y de un trastorno de ansiedad a otro, las más comunes son:

- A nivel psicológico: inseguridad, recelo, agobio, dificultad para centrar la atención y concentrarnos, despistes, sensación de poder perder el control, miedo a “volverse loco”…

- A nivel fisiológico: palpitaciones, nudo en el estómago, sudores, temblores, mareos, sensación de falta de aire, debilidad en las piernas, calambres,…

- A nivel conductual: lo más común es que la persona huya o evite las situaciones que le generan ansiedad y así, en algunos casos, el trastorno llega a ser tan incapacitante, que la persona termina dando de lado su vida cotidiana. Pues es la ansiedad la que la controla y decide por ella.

- A nivel social: irritabilidad, aislamiento, “quedarse en blanco”,…

- A nivel cognitivo: errores de memoria, pensamientos negativos,…

En muchas ocasiones el paciente acude a consulta sin saber lo que le está ocurriendo y preocupado por sus sensaciones, en estos casos, es muy llamativo comprobar que una vez que la persona tiene conocimiento de su problema y pone en marcha, junto con el terapeuta, las técnicas que resultan eficaces para el tratamiento de la ansiedad, la mejora es sustancial. No debemos olvidar que hay que casos en los que los problemas de ansiedad no mejoran sólo con la terapia, si no que la persona necesita tratamiento farmacológico para facilitarle la puesta en práctica de las pautas de la terapia. Observo que muchas personas se resisten o niegan a tomar medicación psiquiátrica, muy probablemente por miedo a la dependencia posterior de ella o al estigma negativo, que aún hoy día existe, sobre las personas que reciben tratamiento psiquiátrico. Con este artículo aprovecho para aconsejar que, cuando en estos casos sea necesario, sigan las prescripciones de su médico y psicólogo, pues ellos le aconsejarán lo mejor para su caso. Eso sí, la toma de fármacos, siempre bajo prescripción médica.

Sea como sea, lo fundamental para una buena evolución por parte del paciente es su motivación y el seguir las pautas médicas y psicológicas indicadas.

04 de noviembre de 2014   Comentar

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