En la primera semana de embarazo, la mujer todavía desconoce que está en cinta, si bien ya pueden detectarse algunos pequeños cambios, como los que vamos a enumerar a continuación.
Antes, veamos en qué punto se encuentra el embarazo. En concreto, el embrión comienza a formarse. En esta etapa, tras la fertilización, el óvulo se divide distintas veces, hasta que adopta la forma de una microscópica mora. Se trata del brote embrionario, que será el futuro embrión.
Asimismo, durante esta primera semana de embarazo, el huevo migra de las trompas de Falopio al útero, produciéndose la implantación posteriormente. Al final de la misma, el embrión mide 0.1 milímetros, es decir, tiene el grosor de un cabello humano.
Por lo tanto, en la primera semana se inicia todo: el óvulo recién fecundado se dividirá y migrará al útero a partir de la primera semana, donde permanecerá durante 9 meses, pero esta circunstancia no tiene manifestaciones que generen posibles síntomas durante la primera semana.
Por lo general, en la primera semana de embarazo no hay ninguna razón para creer que pueda estar embarazada, entre otras razones porque no hay ningún retraso en el período ni se ha aumentado de peso.
Sin embargo, existe la posibilidad de un cambio en los senos, puesto que pueden sentirse más hinchados y sensibles de lo normal. Pero no se trata de un síntoma específico, pues también durante el síndrome premenstrual se producen este mismo síntoma.
Para confirmar los síntomas de un embarazo en la primera semana, sin embargo, no existen pruebas médicas posibles. De hecho, en esta etapa también es inútil hacer una prueba de embarazo casera, pues la HCG (hormona del embarazo que se detecta en la orina o de sangre) se secreta desde el octavo día tras la fertilización.
También es posible sentir que los ovarios están trabajando, si bien es algo muy sutil y variable de una a otra mujer, que puede deberse a la preparación de la próxima regla, pues la primera semana de embarazo es la tercera de amenorrea (la tercera semana de ausencia de reglas), con lo que la próxima regla llegaría pasada una semana, aproximadamente. De este modo, es un momento que coincide con el síndrome premenstrual.
Asimismo, aunque se trata de un periodo muy temprano, asintomático por lo general, también hay que tener en cuenta que los síntomas de embarazo difieren de una mujer a otra. Puede parecer un tanto exagerado, pero algunas mujeres notan los primeros signos desde los primeros días, mientras otras no lo hacen hasta que el embarazo está más avanzado.
Es importante apuntar que los típicos síntomas de embarazo, como fatiga, repulsión ante determinados olores, náuseas, aumento de peso, sensación de sabor metálico en la boca y demás, no se asocian a la primera semana. Así pues, sentirlos fácilmente puede deberse a otras causas.
Por último, dentro de los síntomas de embarazo durante la primera semana no puede dejarse de mencionar la sensación de que así es. A nivel psicológico, hay algunas mujeres que afirman sentir que están embarazadas incluso desde el mismo momento de la fertilización. Sea como fuere, ante algo tan subjetivo, lo cierto es que no sentir nada no significa que no se esté.
Ante la duda, no cabe duda de que sería un buen momento para mejorar el estilo de vida, haciendo un balance de los malos hábitos y planteándose cambios que ayuden a tener un buen comienzo de embarazo desde el principio. Aunque la preparación para un posible embarazo realmente debe realizarse desde antes mismo de la concepción.
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