La ecografía es un procedimiento de diagnóstico por la imagen que emplea ondas sonoras de alta frecuencia para formar una imagen de los órganos y estructuras dentro del cuerpo. El técnico o médico mueve un pequeño dispositivo llamado transductor, que emite ondas de ultrasonidos, sobre la superficie del cuerpo. Previamente se ha puesto un gel sobre la piel para facilitar la transmisión. Estas ondas sonoras se transmiten hacia el área del cuerpo objeto de estudio, el transductor recoge el eco de esas ondas y un ordenador las procesa convirtiéndolas en imágenes que se ven en una pantalla.
La ecografía es un procedimiento no invasivo muy sencillo, en el que no se emplea radiación, y es por eso que se usa habitualmente para la visualización de los fetos en formación en el control del embarazo en la consulta de ginecología.
Tipos de ecografía