Fecundación in Vitro

Noticias sobre Fecundación in Vitro

La fecundación in vitro no causa cáncer de mama

Entre las mujeres que fueron sometidas a un tratamiento de fertilidad o reproducción asistida en los países bajos durante las décadas de los 80 y los 90, la fecundación in vitro no supuso un mayor riesgo de cáncer de mama en comparación con otros tratamientos diferentes, según un estudio publicado en Jama. Tras un seguimiento medio de más de dos décadas, el trabajo concluye que, en comparación con el tratamiento sin FIV éste no aumenta las probabilidades de padecerlo.

Tras finalizarse el seguimiento la conclusión era clara: entre ambos grupos no había diferencias en cuanto al riesgo y éste no se incrementó durante ese tiempo. "Hemos constado la ausencia de un aumento significativo en el riesgo a largo plazo de cáncer de mama entre las mujeres tratadas con estos regímenes de fertilización in vitro", escriben los autores.", recalcan los autores.

El estudio se realizó entre 1980 y 1995 a mujeres sometidas a tratamientos de fertilidad en los Países Bajos durante un promedio de 21 años. Un largo periodo de seguimiento que los estudios anteriores no habían realizado, impidiendo llegar a conclusiones a largo plazo.

Durante muchos años, el cáncer de mama ha sido el tipo de cáncer maligno más común entre las mujeres de todo el mundo, ya que se ha demostrado que los estrógenos y los progestágenos y exógenos y endógenos afectan a la consecución de esta enfermedad. Así, dado que la fecundación in vitro produce de forma temporal una disminución en los niveles de estradiol y progesterona y eleva los niveles hormonales, se ha dicho que podría influir en el riesgo del cáncer de mama.

Estudios anteriores no habían sido concluyentes debido al limitado seguimiento, pero ahora se ha descubierto que no tiene nada que ver con el desarrollo de esta enfermedad, lo que supondría una ventaja a la hora de considerar la fecundación in vitro como una solución a la infertilidad, que ya es usada por miles de personas en todo el mundo.

Ante la ausencia de estudios concluyentes por ésta y otras carencias se decidió llevar a cabo este estudio. El objetivo era investigar si había algún tipo de asociación, puesto que se sabe que los estrógenos y progestágenos afectan al riesgo de cáncer de mama y, por otra parte, los procedimientos de FIV reducen los niveles de estradiol y progesterona, provocando además elevados niveles hormonales.

Habida cuenta de la alta incidencia de cáncer de mama y el gran número de mujeres sometidas a estimulación ovárica mediante el FIV, un pequeño aumento del riesgo podría significar un grave problema de salud pública.

Imagen: Michiel1972 en Wikimedia

La fecundación in vitro y el riesgo de padecer cáncer

Investigadores del Departamento de Salud Pública de Massachusetts, en Estados Unidos, alertan de que los niños nacidos a partir de técnicas de fecundación in vitro podrían tener un mayor riesgo de padecer cáncer cuando lleguen a la edad adulta., según un estudio realizado durante casi tres décadas. Para poder hacer esta afirmación, analizaron a más de un millón y medio de niños nacidos entre 1984 y 2011, de los cuales 26.000 habían sido concebidos in vitro.

Aunque el riesgo de cáncer no resultó significativamente superior en estos niños, sí que se hallaron evidencias de que la reproducción asistida se vincula a un 67% más de riesgo de padecer leucemia o linfoma de Hodgkin. Así, se considera que podría ser uno de los factores de riesgo que llevarían a que los niños padecieses estas y otras enfermedades en la época adulta.

Otros, como las enfermedades genéticas raras, o la edad avanzada de la gestante también podrían ser significativas en este estudio. A pesar de que es una investigación preliminar, podría decirnos mucho sobre el desarrollo de estas patologías y su posible prevención, que por supuesto ha de tener en cuenta otros factores externos e internos.

Alternativas a los problemas para concebir

Mujeres con problemas para concebir deben acudir a un especialista cuando ven que no pueden quedarse embarazadas tras varios meses de intentos. Primero, se les someterá a un estudio de fertilidad para ver si existe un problema físico, y de ser así, se dará un tratamiento adecuado.

Si la esterilidad es leve, la técnica más frecuente que se utiliza es la inseminación artificial, que deposita el semen procesado y mejorado en el interior del útero y se estimula la ovulación con un tratamiento hormonal.

La fecundación in vitro consiste en transferir al útero embriones resultantes de la unión de un óvulo y un espermatozoide que se ha realizado en el laboratorio, cuando la inseminación artificial no ha funcionado.

Estas son las dos técnicas utilizadas para solucionar el problema de la falta de fertilidad, y cada especialista debe dar una solución a cada caso concreto, estudiando los factores que no permiten el embarazo y haciendo un seguimiento. La tasa de probabilidad de embarazo aumenta con cada procedimiento, que son sostenidos en el tiempo, y va a depender también del diagnóstico previo realizado, pero son una buena alternativa para las mujeres que no pueden quedarse embarazadas de forma natural.