Lifting facial

El lifting facial o estiramiento facial, que también se denomina ritidectomía, tiene por objetivo tensar la piel de la cara y el cuello, de forma que se reduzcan las arrugas y pliegues y se corrija  la flacidez y el descolgamiento, todos ellos efectos del paso del tiempo, que pueden verse acentuados por el estrés, factores genéticos, largas exposiciones a los rayos solares, etc. 

Normalmente con el lifting facial se actúa sobre las mejillas y la piel del cuello, aunque también pueden corregirse las cejas y arrugas en la frente. Es una intervención que se suele complementar con la blefaroplastia o cirugía de los párpados. 

Lifting facial antes y después

La operación tiene una duración de 2-4 horas, y se realizará con anestesia local con sedación o con anestesia general, según las condiciones del paciente; la misma consiste en incisiones en la zona temporal y frontal del cuero cabelludo, despegando la piel, para luego poder estirarla, también se tensan músculos. Tras la intervencón se colocorán drenajes que disminuyen la inflamación y posibles hematomas. Las cicatrices no se aprecian, porque el cuero cabelludo las cubre y las de detras de la oreja se corrijen pasadas unas semanas. La cotidianiedad se recuperará pasadas tres semanas, si todo evoluciona correctamente. 

Los resultados son duraderos, logrando el rejuvenecimiento facial e incluso un retraso de la apariencia en relación con la edad cronológica. La operación se puede repetir pasado el tiempo y son raras las complicaciones. 

Las ventajas del lifting facial sin cirugía

Los tratamientos estéticos no invasivos son cada vez más demandados por los pacientes, pero también se buscan los mejores resultados. Lo que se lleva es que tras una operación de este tipo los resultados sean lo más naturales posible, es decir, que no se note que están operados, por eso se está poniendo muy de moda el lifting facial sin cirugia como una alternativa que cumple con estas características y que además es muy duradero en el tiempo e incluso puede llegar a prevenir el envejecimiento.

El lifting sin cirugía pasa por un conjunto de técnicas sin anestesia general o sedación y por lo tanto sin necesidad de quirófano, que se aplican sobre el rostro del paciente para conseguir un resultado natural y estable en el tiempo para ralentizar el envejecimiento facial natural.

Para ello se usan diversas técnicas como hilos tensores, láser sin cirugía o técnicas de masaje asistido con aparatología como la Radiofrecuencia Facial. Incluso podemos inglobar el botox en esta disciplina que cada vez está ganando más adeptos.

Lifting facial japonés sin cirugía

El masaje facial kobido es una técnica milenaria que se conoce como el lifting japonés sin cirugía. Si antaño las emperatrices japonesas embellecían sus rostros de porcelana con él, ahora es tendencia en las clínicas de belleza y spas, que lo ofrecen como una técnica masajística que rejuvenece y libera la energía y tensión de los músculos faciales, hombros, cuello y parte superior del cuerpo.

La filosofía del kobido es la razón de que su realización no solo busque una mejora estética sino también de relajación y mejora de la circulación sanguínea. Su ejecución debe llevarse a cabo por profesionales expertos, formados de forma específica para poder brindar los beneficios de este masaje facial nipón.

Entre otros, combatir el estrés, corregir las arrugas y la flacidez facial, eliminar células muertas, regenerar los tejidos, desintoxicar y activar el sistema linfático, nutrir la piel y activar la circulación o, por ejemplo, aliviar dolores de cabeza, favorecer la vista o aminorar los problemas en el sistema digestivo.

Por último, se efectúa mediante suaves golpeteos y amasamientos, realizando movimientos circulares por todo el rostro, cuello y cráneo, combinando dos fases, una primera orientada al masaje y otra a la estimulación del flujo de energía para su liberación, así como para reducir la tensión bloqueada. El resultado, un rostro más sereno y radiante, además de una paz general y relax corporal.

Lifting facial con acupuntura

El lifting facial con acupuntura es un tratamiento muy seguro y poco invasivo. Aunque en España es muy poco conocida, la Medicina Tradicional China lleva cientos de años aplicándose al campo de la belleza. Fórmulas fitoterapéuticas, técnicas de Tui Na o tratamientos de acupuntura se llevan a cabo a diario en los hospitales chinos.

Al contrario que el lifting quirúrgico, el lifting facial con acupuntura no requiere anestesia ni hospitalización: ni siquiera requiere recuperación.

Al estar la piel y el músculo estrechamente relacionados, cualquier tratamiento sobre el músculo tendrá efectos sobre la piel: si se estimula la musculatura de la cara, la piel se estirará. Así, esta técnica consiste en insertar agujas en puntos específicos del rostro, estimulando la microcirculación sanguínea y la creación de elastina y colágeno de forma natural en la zona tratada.

Al contrario de lo que pueda parecer, el lifting facial con acupuntura no es doloroso ya que utiliza agujas incluso más finas que las empleadas en tratamientos normales de acupuntura. Al ser una técnica menos invasiva, sus efectos son más naturales que los de la cirugía. El número de sesiones necesarias dependerá de cada persona, pero con diez ya disminuyen las arrugas, se corrige el óvalo facial, se tonifica la piel y se recobra el brillo natural.

Los riesgos del lifting facial

El lifting facial es un tratamiento cada vez más habitual entre hombres y mujeres. Se recurre a esta técnica a una edad cada vez más temprana, ya que cada vez más, la cirugía estética está llamando la atención de aquellos pacientes que buscan mejorar su aspecto. Junto al bótox, el lifting facial es un tratamiento que ha calado muy hondo en la sociedad, pero hay que tener en cuenta sus riesgos para no correr ningún peligro.

Que sea una de las operaciones estéticas más practicadas no quiere decir que no tenga sus riesgos. El lifting facial trata de estirar la piel de la cara y tensar los músculos del rostro, de forma que se vayan difuminando las arrugas marcadas y las marcas de expresión que van saliendo con los años. Además, también se elimina el exceso de grasa de algunas zonas para mejorar el aspecto del rostro.

Pero al someternos a esta operación no podemos enfrentarnos a una infección, sino que pueden salirnos moratones y en casos extremos sufrir necrosis. Además, tiene otros riesgos más graves como posibles problemas respiratorios, hemorragias, lesiones en los nervios de la cara e incluso parálisis facial transitoria, por lo que hay que consultar bien al especialista antes de decidirse por este tipo de soluciones y que nos haga las pruebas diagnósticas necesarias.

Precios del litfing facial

El precio de un lifting facial en nuestro país va a depender de la ciudad donde se practique y la clínica que lo realice. Influyen factores como el prestigio y experiencia del cirujano, por eso hay que comparar diferentes opciones e institutos de belleza para apostar por esta cirugía.

De todas formas, podemos establecer una orientación de los precios de un lifting facial y por diferentes zonas para que puedas hacerte una idea de cuánto puede costarte este tratamiento:

• Lifting facial: Precios entre 3000 y 4000 euros
• Lifting de cuello: Precios entre 2500 y 3000 euros
• Lifting facial completo: Entre 6000 y 8000 euros.
• Lifting de párpados: Unos 2000 euros promedio
• Lifting de cejas: Entre 1200 y 2200 euros

Estos precios de lifting facial incluyen los estudios médicos previos, los gastos de internación, productos administrados, y los controles después de la cirugía. Normalmente la primera consulta suele ser gratuita para valorar al paciente y la posibilidad de llevar a cabo la operación.